En uno de los edificios más custodiados del país, la sede principal del Banco Central de Venezuela (BCV), un hombre armado logró irrumpir —ayer a las 3:30 pm— y tomar como rehén a una empleada. Resultó abatido, luego de dispararle a dos custodios de la institución financiera.
“Se metió un tipo armado”, escribió un funcionario del banco en un mensaje de texto que llegó a la corresponsalía de la agencia internacional Reuters, en Caracas. “Hay heridos y presuntamente rehenes”, informó la agencia informativa en un boletín.
El presidente del BCV, Nelson Merentes, informó a la agencia Reuters: “El hombre, quien no fue identificado inmediatamente, entró a la sede del banco —un edificio de 26 pisos—, disparando su arma y preguntando por los directivos de la institución (…). Subió hasta el quinto piso del edificio por las escaleras”, dijo.
“No tenemos ningún motivo, nosotros lo que decimos es llamar a la calma a la gente que trabaja aquí. Esperemos que sea un hecho aislado. En todo caso, esperemos las investigaciones correspondientes”, agregó Merentes.
Un testigo indicó a la agencia que “el pistolero, aparentemente un joven, ingresó por la entrada principal del edificio. A su paso, el detector de metales se activó, por lo que empezó a disparar”, puntualizó.
El edificio del BCV está situado en la céntrica esquina de Carmelitas, sobre la avenida Urdaneta, de la capital venezolana, a pocos metros del Palacio de Miraflores, sede del Poder Ejecutivo.
En minutos, comisiones del Servicio Bolivariano de Inteligencia (Sebin), la Brigada de Acciones Especiales (BAE) del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc), y de la Policía Nacional Bolivariana (PNB) llegaron al edificio.
El gatillero no portaba identificación. Vestía un pantalón oscuro, camisa celeste y chaqueta azul. Calzaba zapatos marrones, según pudo apreciarse en las fotografías que circularon del cuerpo tendido en uno de los pasillos de la institución. No se especificó el tipo de arma que disparó.
El tiroteo con los efectivos de seguridad, en el cual cayó abatido el pistolero, se registró en el segundo piso del edificio. Medios de la capital informaron que el gatillero cargaba un explosivo.
Los custodios heridos fueron identificados como Osman Sequer, herido en el brazo derecho, y José Quintero, quien recibió un balazo en la pierna izquierda”, informó el periodista Javier Mayorca. “Los dos efectivos heridos están estables en una clínica privada”, agregó Merentes.
El reporte de la situación irregular tomó el Twitter y se convirtió en tendencia en Venezuela. El BCV cuenta con un cuerpo de seguridad propio, con su respectivo parque de armas, se conoció.
Anoche, el director del Cicpc, Douglas Rico, dijo que el caso está “en proceso de investigaciones, vamos a determinar de quién se trata y en qué circunstancias esta persona llegó a este recinto”.
Vía Panorama/www.diariorepublica.com