No hay forma alguna para evitar el trabajo de la gravedad; en algún punto de tu vida tus senos perderán su elasticidad. Y, de acuerdo a un estudio publicado en el Diario de Biología, el tejido de las mamas envejece de 2 a 3 años más rápido que el resto del cuerpo. Y aunque esto puede verse afectado por factores genéticos, hay uno par de hábitos que puedes eliminar para evitar que se caigan de manera prematura.
Fumar: Fumar debilita la elasticidad de la piel… incluyendo la de tus queridos y hermosos senos. Además empeora la circulación de la sangre, reduciendo así las cantidades de colágeno en la piel. Esto hace que ésta se debilite y envejezca rápidamente. Y por si no lo sabías, fumar es malo para tu salud… y para la salud de los que te rodean.
Una mala postura y no ejercitarse: Si no fortaleces y ejercitas los músculos de tu pecho, obviamente se deteriorarán. Y aún así, algunos ejercicios repetitivos y con movimientos drásticos como correr podrían perjudicar la elasticidad de tu piel. También es importante que cuides tu postura y apoyes tus senos todos los días.
Usar el bra equivocado: Esto es completamente normal. La mayoría de las mujeres no usan la talla adecuada, y por ende los bras eventualmente se agrandan y no aportan el soporte que tus senos necesitan. La caída de los senos es inevitable, pero si el bra no los soporta, la piel terminará lastimándose.