Henrique Capriles Radonski se refirió a la situación que atraviesa el país en vísperas de la toma de posesión del Presidente, prevista para el próximo 10 de enero.
“Yo no sé qué están esperando los magistrados del TSJ.En Venezuela en este momento se plantea un conflicto sin duda alguna constitucional, tiene que haber una respuesta de la institucionalidad frente a ese conflicto”, cuestionó el gobernador al tiempo que aseveró que “el 10 de enero termina un período, aquí no estamos en una Monarquía”.
En ese sentido, aclaró que el hecho de que el 10 de enero se termine un período constitucional “no quiere decir que el presidente electo deje de ser electo”.“El país está esperando una interpretación clara de lo que dice este texto constitucional”, dijo el también excandidato presidencial.
“Aquí no estamos en Cuba donde se pasan el poder de uno a otro”, aseveró al resaltar: “Somos los venezolanos los que tenemos que encontrar las soluciones a nuestros problemas”.
“El pueblo votó el 7 de octubre no por el gobierno, el pueblo votó por una persona“, dijo Capriles señalando que en caso de que esa persona no pueda asumir su cargo “la respuesta está en la Constitución”.
“El Tribunal Supremo de Justicia está en horas de fijar posición frente al país y frente a la historia“, enfatizó.Al preguntársele qué pasaría en caso de que el TSJ apoye la tesis de la “continuidad administrativa”, Capriles dijo que “hay que tener cuidado con la conveniencia (…) Una decisión equivocada puede contribuir con la anarquía”.
“El escenario de desconocer la Constitución y de la anarquía no le conviene a nadie en Venezuela”, sumó.
La Fuerza Armada Nacional Bolivariana “no tiene una posición sesgada»
Capriles indicó que ante cualquier situación existe una Fuerza Armada Nacional Bolivariana que “no tiene una posición sesgada ni politiquera, que están con la Constitución y están dispuestos a hacerlos valer”.
El gobernador de Miranda también subrayó que lo primordial es mantener la institucionalidad del país, no un escenario de la anarquía, “por eso dejó la reflexión: ¿Qué pasaría si convocamos a la mitad del país a la calle? Sería una guerra”.
“No cuenten con la oposición para poner a pelear al pueblo”, advirtió.
“Ahora, si pretenden alguna acción, habrá una respuesta, pero estamos agotando todas las instancias para que en el país prive la institucionalidad”.
Vía Noticias24