El Gobierno aseguró que la colocación de alimentos están a su «máxima capacidad» en vísperas de las elecciones presidenciales, a realizarse este 7 de octubre. Descartó desabastecimiento.
Carlos Osorio, ministro de Alimentación, informó que hacen monitoreos a los inventarios y distribución de productos esenciales para la canasta.
En los mercados y automercados las cajas registradoras se muestran abarrotadas de compradores. Las amas de casa y padres de familia cargaron los carritos repletos de comida.
Tiraron leche, arroz, margarina y harina de maíz, que semanas anteriores eran difíciles de encontrar. La aglomeración coincidió con el ingreso de pedidos solicitados a las industrias de alimentos.
Osorio negó la posibilidad de desabastecimiento para el domingo electoral. Culpó a la oposición de fomentar «compras nerviosas», utilizando la situación como «herramienta política» ante el evento comicial.
La Cámara de Industriales del estado Zulia anunció «una logística de abastecimiento, que es en todo el país». El gremio garantizó productos en los anaqueles y aunque «haya compras nerviosas puede haber algunos fallos» puntuales en sucursales, «pero no en toda la cadena».
Instó a las familias a trasladarse a otras sucursales donde estará el alimento.
Cola de carritos
Sonia Montilla, ama de casa, aseguró al salir de un automercado de Maracaibo que los pasillos del establecimiento «están colapsados» de compradores porque la «gente tiene miedo» a lo que pueda ocurrir el domingo.
Recordó cómo miraba a las personas que metían productos en el carrito sin mirar los precios; supuso que solo buscaban «abastecerse». Negó estar nerviosa.
Hizo su abasto «por no tener comida en casa». Llevó lo necesario. Se sorprendió «al ver que aumentaron los precios, hasta de los huevos…»
Gladys Castro, ama de casa, fue a un automercado de Bella Vista. Acudió para adquirir ocho productos y salió con más de los apuntados en su lista semanal. Dijo que aprovechaba que en los anaqueles había «harina de maíz y margarina».
Dijo necesitar solo nueve, pero a falta de carne de res, cargó con «otras que no traía anotadas».Frente al anaquelNelly Castro, compradora: «Hay compras nerviosas, la gente tiene que hacer cola para que se desocupe un carrito. Es el doble de gente que viene normalmente».Juliana Leal, compradora: «Me imagino que sí hay compras nerviosas, pero para mí es igual estar aquí. Compro igual que siempre. Conseguí hasta leche».
Vía Diario La Verdad/Jazmín Ojeda