La Sala Constitucional del Tribunal Supremo de Justicia declaró inadmisible la solicitud hecha por un grupo de ocho personas de
eliminar el sistema de captahuellas instalado para la adquisición de alimentos y medicinas.
Dicen los demandantes que el sistema biométrico “solo serviría para crear más colas, malestar, impaciencia”. Los magistrados responden que ese planteamiento es “solo una hipótesis; los argumentos carecen de pruebas que permitan advertir la existencia de la señalada amenaza para la población, de manera que no pueda evaluarse el perjuicio que pudiera ocasionar”.
ÚN/www.diariorepublica.com