El 5 de febrero un niño de 12 años que estudia sexto grado le disparó a otro pequeño de 10 años que cursa cuarto grado; todo ocurrió en el patio de recreo del instituto privado Walt Disney, en la calle 3 de Propatria.
Uno de los pequeños resultó herido en una de sus piernas y está fuera de peligro. Según un grupo de estudiantes de colegios cercanos al plantel Walt Disney, el de 12 años le estaba mostrando la pistola a su amigo y accionó el arma varias veces. Al ver que no disparaba, creyó que no había peligro y la colocó sobre la pierna de su compañero. Cuando apretó el gatillo, una bala impactó al menor de 10 años. Pese a que perdió mucha sangre, lo pudieron salvar.
Lo ocurrido en la institución ha puesto sobre el tapete una realidad: el ingreso de armas a los planteles.
Entre 2014 y lo que va de 2015, de acuerdo con publicaciones de prensa, en planteles de la Gran Caracas se han reportado 10 denuncias de niños a quienes les han decomisado armas y explosivos dentro de las instituciones educativas. Ocho de los casos denunciados corresponden a hechos de violencia con el uso de armas blancas y de fuego que han dejado cinco muertos y un herido.
Según Fernando Pereira, coordinador de los Centros Comunitarios de Aprendizaje por los Derechos de la Niñez y Adolescencia (Cecodap), la mayoría de las víctimas y victimarios son muchachos, cuyas edades oscilan entre los 12 y los 15 años.
Pereira indica que 80% de los hechos de violencia obedecen a peleas entre los jóvenes por acoso. También se han presentado riñas por motivos pasionales que han terminado en saldos trágicos.
Estudio revelador
Aunque en los últimos dos años no se han hecho estudios sobre el ingreso de armas a planteles, en el año 2012 el Programa Igualdad de Oportunidades de la Universidad Simón Bolívar realizó un informe con el registro de visitas a 75 planteles; 75% de ellos son públicos y 25% son privados que reciben subsidio.
Estas escuelas se ubican en Caracas, Miranda y Vargas.
El estudio reveló que 11% de las instituciones visitadas reportó la presencia de armas blancas, mientras que en 5 % de los colegios consultados confirmaron que habían detectado armas de fuego en los salones de clases.
De los 75 colegios encuestados, en 14 hubo situaciones de violencia con el uso de objetos contundentes (piedras, botellas, palos, candados, manoplas y cadenas, entre otros instrumentos).
Para Fernando Pereira la situación planteada en esta investigación se mantiene actualmente, es la realidad actual de los centros educativos.
Vía EU / www.diariorepublica.com