Este jueves 7 de mazo, Suecia se convirtió formalmente en el 32º miembro de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (Otan), y abandonan finalmente su histórica posición de neutralidad en el continente.
Ulf Kristersson, primer ministro de Suecia, estuvo en Washington DC para entregar los documentos de ratificación al secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken.
“Las cosas buenas ocurren a aquellos que esperan”, dijo Blinken ante los dos años de espera que debió pasar el Gobierno sueco para finiquitar su ingreso a la organización.
En mayo de 2022, Sueca solicitó, junto a Finlandia, su entrada en la Otan, y a pesar de que les aseguraron que su ingreso sería “el más rápido de la historia”, esto no resultó siendo así.
Mientras que la adhesión de Finlandia fue aprobada en abril de 2023, sus vecinos escandinavos debieron seguir en espera por la oposición de Turquía y Hungría.
El parlamento turco aprobó la candidatura sueca en enero de este año, pero Hungría tardó aún más. El primer ministro, Viktor Orban, se negó a dar luz verde a su candidatura en varias ocasiones, hasta que finalmente cedieron en febrero.
Para la población sueca, ingresar a la Otan nunca fue un tema de mayor interés, sin embargo, todo cambió luego de la invasión de Rusia a Ucrania.
El secretario general de la Otan, Jens Stoltenberg, aseguró que la adición de Suecia “hace a la Otan más fuerte, a Suecia más segura y a toda la alianza más segura. Espero izar su bandera en la sede de la Otan el lunes”.
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Via EFE/Diario Republica