La cifra de muertos en el asalto policial de este miércoles a las acampadas de los islamistas en El Cairo es objeto de confusión, ya que mientras las autoridades egipcias han informado de 15 muertos, los Hermanos Musulmanes elevan el número a 200 fallecidos.
El Ministerio de Sanidad egipcio ha confirmado, hasta el momento, 15 muertos y 203 heridos por la operación policial para desmantelar las dos acampadas cairotas de los seguidores deldepuesto presidente Mohamed Mursi, según la televisión estatal.
Los Hermanos Musulmanes, grupo al que perteneció Mursi hasta que llegó a la Presidencia, señalaron, por su parte, que hay al menos 200 muertos y miles de heridos entre sus seguidores por el asalto policial.
El Ministerio del Interior egipcio confirmó que cinco de los fallecidos son policías y que tienen 28 heridos en sus filas.Además, al menos dos personas murieron este miércoles en las protestas islamistas llevadas a cabo en plaza de Mustafa Mahmud contra la operación policial para desmantelar las acampadas.
La organización islamista apuntó que «francotiradores delMinisterio del Interior» abrieron fuego contra los manifestantes en Mustafa Mahmud.
Las protestas contra la operación policial para desmantelar las acampadas en El Cairo se han extendido por diversas partes del país, donde se están registrando enfrentamientos y disturbios, sin que por el momento se pueda confirmar la cifra total de víctimas.
La violencia de las últimas horas convierte a la jornada de este miércoles en una de las más sangrientas en Egipto desde el golpe de Estado del pasado 3 de julio, cuando Mursi fue depuesto por el Ejército.
La Unión Europea (UE), por su parte, reclamó contención a todas las partes en Egipto y consideró «extremadamente preocupantes» las informaciones sobre víctimas en el desalojo de las acampadas de los seguidores de Mursi.
«La violencia no ofrece soluciones y por eso estamos instando con fuerza a todas las partes a ejercer la mayor contención», señaló el portavoz comunitario Peter Stano.
El portavoz aseguró que la UE sigue con «gran preocupación» la situación sobre el terreno y subrayó su compromiso con un Egipto «fuerte, democrático, inclusivo y próspero».Mientras tanto, el Gobierno egipcio amenazó con hacer frente con «toda la dureza y firmeza» a los ataques contra propiedades públicas y comisarías.
El portavoz del Consejo de Ministros Sherif Shauqi leyó un comunicado del Ejecutivo en el que aseguró que perseguirán a «los alborotadores» para proteger las propiedades del pueblo.
Agencias