Una primera ecografía practicada a la mujer a los cinco meses de embarazo mostró que se trataba de dos bebés.
En un segundo estudio, a los siete meses de gestación, los médicos pudieron ver que las niñas estaban unidas, por lo que el caso fue derivado de Trinidad a la maternidad cruceña.
La madre estuvo internada en el hospital durante un mes hasta completar las 37 semanas de embarazo.
Las pequeñas, que nacieron mediante cesárea, pesaban juntas cinco kilos y estaban unidas a la altura del pecho, compartiendo el corazón, el hígado y el bazo.
Los médicos de Santa Cruz descartaron la posibilidad de separar a las niñas e indicaron en los últimos días que sería difícil que pudieran sobrevivir por las múltiples malformaciones que presentaban.
Vía EN/www.diariorepublica.com