Una niña pequeña deseo de Navidad inspiró a miles de personas a cantar en las , murió en la madrugada de este 25 de diciembre.
Brown, de 8 años, sufría de leucemia.
“Nuestro pequeño ángel en la se sus alas rosadas de ángel en el cielo”, dice una publicación en la en sobre ella. “Dio su último aliento en a las 3:10 rodeada por toda su y amigos. La extraño mucho”.
Delaney Brown de West Reading, Pensilvania, “inspiró a la comunidad y tocó corazones alrededor del mundo”, reportó WFMZ, estación afiliada de .
Le encantaban la música y el .
Sus deseos antes de morir fue conocer a la superestrella de música Taylor y que algunas personas fueran a su a cantar villancicos.
El viernes —su cumpleaños— y hablaron a través de FaceTime, una aplicación que hacer videochat entre personas con .
Luego, en la del sábado, llegaron los . Al principio fueron cientos de personas, luego miles. Luego fueron cerca de 10.000, reportó WFMZ.
Estaba muy débil poder asomarse por la , pero escuchó la música maravillosa.
“¡Los puedo escuchar! ¡Los amo!”, dijo en una publicación de que mostraba una de ella en la con una de oxígeno, levantando sus pulgares.
fue diagnosticada con leucemia mieloide aguda hace siete meses. La pasada los le dijeron a la que tenía 70% de células cancerígenas en su sangre. El jueves fue trasladada del a su .
La celebración de villancicos frente a su atrajo a personas de todas partes. Su de danza estuvo allí honrarla. Incluso llegó un Santa Claus.
Muchos de los contuvieron el llanto.
“No puedo expresar cómo me siento”, dijo a WFMZ Krysta Rebe, quien tiene una hija de la edad de.
Sólo fue una hora de canto, pero levantó el de quienes asistieron.
“Por mucho que yo quiero que se haga el milagro de salvar la de una niña de 8 años, , el milagro fue que la niña de 8 años le enseñara a su comunidad, a la y a el país el verdadero significado de la Navidad”, escribió Marianne Franken en .
El miércoles, miles de persona le dieron ‘Me gusta’ y comentaron en la publicación de que anunció la muerte de la niña.
“No lloro por , quien vive en paz y felicidad con el Señor”, escribió Cornell Stornbergh. “Lloro por nosotros, que ahora tenemos que vivir en un sin ella”.
Vía ACN
