Los encargados de un festival religioso en la ciudad de Nanchang, provincia de Jiangxi, China, no tuvieron mejor idea que enjaular a los indigentes para que no molesten.
Las autoridades de la ciudad advirtieron a los mendigos “o se quedan dentro de las jaulas o serán expulsados de la ciudad”.
Alegan que la decisión fue tomada en pos de proteger a los visitantes locales y turistas extranjeros que lleguen a la ciudad. “No queremos que los mendigos acosen a los turista pidiéndole plata”.
Según un funcionario de la ciudad, “los mendigo están muy cómodos en sus jaula”. Además agrego “los visitantes les dan alimentos, agua y hasta dinero. Para ellos es mucho mejor estar en las jaulas que en las transitadas calles. Y cuando se cansen, pueden retirarse y dejar la ciudad”.
Como se muestra en la foto, los indigentes enjaulados tienen bandejas en donde la gente le puede dejar dinero o comida. Obviamente organizaciones de derechos humanos cuestionaron el trato y la privación de la libertad que sufren estas personas.
Agencias