Jacques Polge, la «nariz» de Chanel se retira después de llevar desde 1978 como perfumero de la maison francesa. La suya es una de esas trayectorias dentro del mundo del perfume que no se pueden olvidar. A él le debemos los olores de Chanel de los últimos treinta años, en los que ha trabajado gracias a su olfato en numerosos perfumes de éxito, entre los que están Coco, Égoïste, Allure o Coco Mademoiselle.
Llegó a la perfumería practicamente por casualidad, cuando en sus años de juventud viajó a Nueva York para iniciarse en la materia y luego en París trabajó para otras casas de moda. Con el tiempo llegó a convertirse en el olfato de la mítica firma, sucediendo a otras dos leyendas que ya pasaron por sus funciones, Ernest Beaux, creador de Chanel Nº5 yHenri Robert, creador del perfume Nº19.
A Jacques Polge le sucederá su hijo Olivier Polge, que ha heredado de su padre el talento perfumista en el que también ha cosechado numerosos éxitos desde 1998, año en el que empezó a ser la «nariz» del lujo tras cursar estudios de historia. Su olfato es uno de los más solicitados por las marcas de moda, entre las que están Kenzo, Dior, Salvatore Ferragamo, Dolce&Gabanna, Jil Sander o Bulgari. Recibió en 2009 el Premio Internacional del Perfume por su talento, que desde septiembre será exclusivo de Chanel, ya que pasará a ocupar el lugar que su padre ostententaba hasta ahora.
Vía News Republic