«Como el Presidente señaló, este año 2015 se celebra el 80 aniversario del establecimiento de relaciones diplomáticas ininterrumpidas entre la República de Cuba y la Santa Sede (…) Hoy renovamos estos lazos de cooperación y amistad para que la Iglesia siga acompañando y alentando al pueblo cubano en sus esperanzas y en sus preocupaciones, con libertad y con los medios necesarios para llevar el anuncio del Reino hasta las periferias existenciales de la sociedad».
Estas fueron parte de las palabras que diera el Papa Francisco al llegar a Cuba, donde realizará una visita de tres días, y que forma parte de la segunda que realiza al continente Americano; pero que se destaca por realizarse luego de que la Isla Caribeña iniciara un proceso de reconciliación diplomática con Estados Unidos, donde la Iglesia Católica tuvo un papel predominante.
Entre sus palabras hizo alusión a la Virgen de la Caridad del Cobre, cuya fiesta celebra el I Centenario «Ella ha acompañado la historia del pueblo cubano, sosteniendo la esperanza que preserva la dignidad de las personas en las situaciones más difíciles y abanderando la promoción de todo aquello que dignifica al ser humano (…) Tendré ocasión de ir al Cobre, como hijo y peregrino, para pedirle a nuestra Madre por todos sus hijos cubanos y por esta querida Nación, para que transite por los caminos de justicia, paz,libertad y reconciliación».
El tema de Cuba y Venezuela no pasó por debajo de la mesa y al respecto apuntó «Desde hace varios meses, estamos siendo testigos de un acontecimiento que nos llena de esperanza: el proceso de normalización de las relaciones entre dos pueblos, tras años de distanciamiento. Ese proceso, es un signo de la victoria de la cultura del encuentro, del diálogo, del sistema del acrecentamiento universa por sobre el sistema, muerto para siempre, de dinastía y de grupos»
A lo que agregó «»El mundo necesita reconciliación» dijo el papa Francisco en su visita a Cuba al admitir que se vive «una atmósfera de tercera guerra mundial».
Previo a las palabras, el Pontífice fue recibido por el presidente cubano Raúl Castro en el aeropuerto José Martí con palabras de elogio a las enciclicas papales sobre temas sociales y ambientales.
En su discurso, Castro atacó con dureza el capitalismo, señalando que «la profunda crisis se descarga con crudeza sobre los países del tercer mundo. Ofende a la conciencia humana lo que ocurre con los migrantes y los pobres. Estos son los marginados del mundo», afirmó.También destacó que la revolución cubana busca crear «un socialismo próspero y sostenible, centrado en el ser humano».
El presidente de Cuba, Raúl Castro, en su primera alocución después de la llegada del papa Francisco le agradeció al sumo pontífice su ayuda en el diálogo por la reanudación de las relaciones diplomáticas con Estados Unidos, informan los medios.