Las tres atraviesan por un estado crítico, pero al menos una de ellas está consciente y ya pide de beber. Las sobrevivientes del accidente aéreo en La Habana, que causó la muerte de 107 personas, son tratadas con cuidado y aún están en riesgo vital.
Las sobrevivientes fueron identificadas como las cubanas Mailen Díaz Almaguer, de 19 años; Grettel Landrovell Font, de 23 años; y Emiley Sánchez de la O, de 39. «De estas tres, la última está consciente y comunicativa», dijo el médico, sin entregar mayores detalles sobre la situación de las otras dos pacientes.
El presidente de Cuba, Miguel Díaz-Canel , estuvo en el hospital para indagar sobre el estado de salud de las heridas, según informó la TV oficial.
El doctor Martínez precisó que las sobrevivientes fueron sometidas a varias cirugías, presentan traumatismo craneal y múltiples fracturas en miembros inferiores. Los reportes pormenorizados serán entregados a los familiares en privado.
«No tenía corazón para llegar aquí, pero ya estoy tranquila. Me subió la presión, soy diabética e hipertensa, pero estoy tranquilita, con mente positiva de que pueda estar mucho mejor», dijo a la AFP la señora Esther la O, madre de Emiley.
Su hija estaba de vacaciones en La Habana. «Ella sabe que estoy aquí, que su hijo está aquí. Pidió agua. Siento que hay mejoría», aseguró.
Las tres mujeres fueron halladas con vida el viernes luego de que un Boeing 737-200 se estrelló al mediodía del viernes cuando acababa de despegar desde el aeropuerto internacional de la capital cubana hacia Holguín (este).
El siniestro
Una aeronave arrendada por la línea Cubana de Aviación con 110 personas a bordo se desplomó y se incendió el viernes sobre un campo sembrado después de haber despegado del aeropuerto internacional José Martí en La Habana, en una de las peores tragedias aéreas de la isla en décadas.
El avión colapsó sobre el mediodía cuando se disponía a realizar un vuelo doméstico entre la capital y la oriental ciudad de Holguín, a unos 700 kilómetros de la capital, dejando una imagen dantesca de partes calcinadas y retorcidas.
En la nave viajaban 104 pasajeros, la mayoría cubanos y unos pocos extranjeros –hasta ahora sólo se ha confirmado que dos son argentinos aunque las autoridades hablaron de unos cinco– y seis tripulantes mexicanos.
El gobierno cubano decretó el fin de semana de duelo nacional debido a la tragedia, por lo que las banderas cubanas estarán a media asta.
Agencias AFP y AP