Un paro de empleados del ente estatal que administra los aeropuertos brasileños (Infraero) en reclamo de mejores salarios complicó este miércoles la actividad en 63 terminales aéreas de ese país.
Un balance divulgado a media mañana informó que, hasta las 11, hubo 54 cancelaciones y 134 vuelos demorados, un índice que, según Infraero, no es superior al registrado en un día normal.
Según el Sindicato de Aeroportuarios, el paro es en protesta contra la oferta salarial presentada por Infraero, que propone un aumento del 6,4 por ciento en los salarios. Los trabajadores reclaman una suba del 16 por ciento.
«De no haber una nueva propuesta de la Infraero, la huelga seguirá», afirmó Samuel Santos, uno de los representantes de los trabajadores, quien agregó que el sueldo promedio de los 13 mil 600 funcionarios del sector es equivalente a unos 700 dólares mensuales.
El paro también se realiza en protesta contra el plan del gobierno de Dilma Rousseff de entregar a la iniciativa privada, mediante concesiones, la administración de algunos de los principales aeropuertos brasileños.
Ya se abrieron las concesiones para los aeropuertos de Guarulhos (San Pablo), Brasilia y Campinas: Mientras que en octubre será el turno de Galeao (Río de Janeiro) y de Confins (Belo Horizonte).
La presidenta Rousseff, quien viajó hoy de Brasilia a San Pablo, fue abucheada cuando desembarcó en el aeropuerto de Congonhas, por un grupo de empleados que rechazan el proceso de privatización.
El Clarín