El primer ministro canadiense, Justin Trudeau, anunció que su país tomará represalias por la decisión de EEUU de imponer aranceles a las exportaciones de acero y aluminio y dejó claro que las relaciones entre los dos países resultarán gravemente afectadas.
Trudeau y su ministra de Asuntos Exteriores, Chrystia Freeland, explicaron que Canadá impondrá aranceles extraordinarios a las exportaciones estadounidenses que igualarán la cantidad que Washington impondrá a los productores canadienses.
Freeland cifró los aranceles canadienses en 16.600 millones de dólares canadienses (12.800 millones de dólares estadounidenses) y señaló que Ottawa recargará por esa cantidad las exportaciones estadounidenses de acero, aluminio y otros productos como cerveza, whisky, papel higiénico y laca para el pelo.
Los aranceles canadienses entrarán en vigor el 1 de julio. Hasta entonces, las autoridades canadienses consultarán con diversos sectores del país para ajustar la lista de productos afectados.
Dirigiéndose a los estadounidenses, Freeland señaló que “la mitad de las exportaciones estadounidenses de acero” tienen como destino Canadá lo que supone que el sector que supuestamente Estados Unidos quiere proteger será uno de los más afectados por las represalias canadienses.