Hace dos años, Fethi Nourine de Argelia se retiró del Campeonato Mundial de Judo 2019 cuando tuvo que enfrentarse a su oponente israelí Tohar Butbul. La historia se repite nuevamente, esta vez en los Juegos Olímpicos de Tokio 2020.
Según el sorteo de la división masculina de menos de 73 kilos, Nourine y Butbul potencialmente se desafiarían en la segunda ronda del torneo. Así que el yudoca argelino, una vez más, abandonó la competencia, afirmando que su apoyo a la causa palestina le impedía competir contra Israel en cualquier enfrentamiento por campeonato.
«Trabajamos mucho para llegar a los Juegos Olímpicos», aseveró Nourine, quien debía competir en la primera ronda el lunes. «Pero la causa palestina es más grande que todo esto», agregó el yudoca.
A su vez, el entrenador del deportista, Amar Ben Yaklif, calificó la decisión del joven de retirarse de los JJ.OO. como «correcta», informa el periódico The Times of Israel citando reportes de los medios argelinos. De esta manera, Butbul ahora se enfrentará a Mohamed Abdalrasool de Sudán en su primera pelea.
«No toleraremos ninguna discriminación»
Mientras tanto, Nourine y su entrenador han sido suspendidos temporalmente por el comité ejecutivo de la Federación Internacional de Judo (IJF, pos sus siglas en inglés). Por su parte, el Comité Olímpico argelino también ha retirado la acreditación de ambos hombres y los ha enviado a casa.
La IJF subrayó que la postura del participante desertor estaba «en total oposición a la filosofía de la Federación Internacional de Judo», recordando que el organismo tiene «una estricta política de no discriminación, promoviendo la solidaridad como principio clave, reforzada por los valores del judo».
«El judo se basa en un código moral sólido, que incluye el respeto y la amistad, para fomentar la solidaridad y no toleraremos ninguna discriminación, ya que va en contra de los valores y principios fundamentales de nuestro deporte», reza el comunicado de la organización.
La polémica israelí en judo
Esta no es la primera vez que las objeciones para enfrentar a los deportistas israelíes han generado de qué hablar en las competencias internacionales de judo. En los JJ.OO. de 2016 en Río, el Comité Olímpico Internacional envió a casa al egipcio Islam El Shehaby antes de finalizar el torneo por negarse a estrechar la mano del israelí Or Sasson después de que este, el eventual ganador de la medalla de bronce, lo derrotó.
En abril, la FIJ le impuso a Irán una suspensión de cuatro años por «infracciones repetidas y muy graves» de los estatutos de la organización después de que un yudoca persa afirmara que se vio obligado a perder algunas peleas para no enfrentarse a los rivales israelíes.
Vía Reuters/Diario República
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