Con su nuevo álbum «Strange Little Birds», Garbage encaró tres desafíos como un grupo que tiene más de dos décadas de historia: crear un disco honesto que mostrara todas las facetas de sus integrantes, descubrir nuevos paisajes sonoros sin temor a las críticas, y entender que deseaban grabar un disco que una banda joven no pudiera lograr en el estudio.
En palabras de la vocalista Shirley Manson, el resultado es un «gran álbum» que por primera vez hizo sentir al conjunto escocés-estadounidense plenamente libre y confiado.
«No podemos ser la mejor banda del mundo, pero realmente nos gusta nuestra música y haber sobrevivido, después de 20 años, en una industria difícil como la de la música. Nos hace ver que hemos hecho las cosas bien», dijo la cantautora en una entrevista con The Associated Press en la Ciudad de México, donde promocionaba el disco que traerá al cuarteto de regreso a Latinoamérica en septiembre.
«Strange Little Birds» debutó en el primer lugar de las listas de popularidad de rock y música alternativa de Billboard y alcanzó la posición No. 14 de la lista general de los 200 discos.
Manson señaló que durante mucho tiempo ella y sus compañeros, el baterista y productor Butch Vig y los guitarristas Steve Marker y Duke Erikson, lidiaron con el sentimiento de que no eran lo suficientemente talentosos. Explicó que el título del álbum, que quiere decir «Pajaritos raros», obedece al sentimiento del grupo de que eran una especie de «patitos feos», ajenos a los cánones y estructuras que la industria de la música impone a los artistas.
«Todavía me siento como un ave extraña en la parvada. Los seres humanos, en general, nos sentimos raros y está bien, es parte de nuestra naturaleza. La gente también parece estar obligada a mostrarse como gente perfecta; y para mí, está bien sentirse tímido, extraño e incómodo», apuntó la intérprete de 49 años. «¡Yo no quiero ser perfecta! A veces soy insegura, celosa, y a veces también me siento un poco perdida, pero ahora puedo lidiar con eso y aceptarme tal cual soy».
Con sonidos más electrónicos y letras oscuras e introspectivas, todas ellas de la autoría de Manson, el sexto álbum de Garbage salió al mercado el 10 de junio e incluye el sencillo «Empty». Se grabó a finales del año pasado en Los Ángeles bajo la producción del baterista Butch Vig, reconocido por su trabajo con agrupaciones como Nirvana, Smashing Pumpkins, Foo Fighters y Green Day.
Garbage anunció el miércoles dos conciertos en México, el 5 y 7 de septiembre, en la Arena Monterrey y en la Arena Ciudad de México, respectivamente, y en los próximos días revelará los detalles de su regreso a Santiago de Chile y su esperado debut en Perú.
«A principios de 2017 iremos a Argentina, Brasil y probablemente a Colombia. El nuevo disco ha tenido mucha aceptación y eso nos permitirá llegar a nuevo lugares. También me encantaría regresar a Uruguay, ir a Paraguay», dijo Manson, quien aprovechó su paso por la capital mexicana para visitar el antiguo barrio de Coyoacán y asistir a una recepción organizada por la Embajada del Reino Unido en México.
Garbage se formó en 1994 y ha vendido más de 17 millones de discos a nivel mundial. Su discografía también incluye «Garbage» (1995), «Version 2.0» (1998), «Beautiful Garbage (2001)», «Bleed Like Me» (2005) y «Not Your Kind of People» (2012). Algunas de sus canciones más conocidas son «Only Happy When it Rains», «Queer», «Push It», «I Think I’m Paranoid» y «Stupid Girl».
«¡Sobrevivimos! ¡Podemos decir con seguridad que lo logramos después de 20 años! Ahora tenemos nueva música y una nueva gira mundial lista y todo eso me hace sentir feliz, fuerte y segura de sí misma», dijo Manson con una sonrisa.
«Después de muchos años nos sentimos tremendamente privilegiados de ser una banda que puede sobrevivir las modas pasajeras y los avances tecnológicos que han transformado la industria de la música», manifestó. «Cuando uno ha lidiado con eso, puede encontrar un lugar hermoso como artista y como persona».
Vía Panorama / www.diariorepublica.com