Venezuela entra en el asueto de carnaval y para las familias mantener la tradición de disfrazar a los más pequeños de la casa, es una tarea cuesta arriba si se tienen en cuenta los altos costos de estos llamativos vestuarios que pueden llegar a costar de 15 dólares en adelante.
Comerciantes afirman que las ventas este año han caído al menos un 80 por ciento, en especial debido a la pandemia por la covid-19.
Mientras que los padres buscan opciones para mantener la ilusión en los pequeños, como hacer los disfraces ellos mismos. Aunque, aseguran que la prioridad en esta época es llevar el alimento al hogar.
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Via UR/Diario Republica