Zinedine Zidane, técnico del Real Madrid, huyó del papel de favorito que se concede a su equipo en el Clásico por los seis puntos de ventaja sobre el Barcelona y aseguró que espera un partido «diferente al año pasado», cuando conquistó el Camp Nou al ir «con el trasero apretado».
A un día de la disputa del Clásico del fútbol español la cara de Zidane no pudo ser más relajada en rueda de prensa. Sonriente, bromista, su comparecencia mostró la ilusión con la que encaran la visita al Barcelona pero también la tranquilidad del líder.
Vía EFE/www.diariorepublica.com