El pelotero venezolano Miguel Cabrera se perderá el resto de la temporada y por primera vez en su carrera estará dos veces en la lista de incapacitados en una misma campaña, luego de abandonar el encuentro del pasado martes con el tendón del bíceps izquierdo roto, lo que le obligará a ser operado y seguir un largo proceso de rehabilitación en los próximos meses.
Cabrera notó lo que sucedía al hacer swing ante un pitcheo abajo y afuera, en el encuentro de sus Tigres de Detroit frente a los Mellizos de Minnesota. Sin esperar mayor cosa, caminó al dugout, con la mano derecha sujetando la región adolorida, y se retiró directamente hacia al clubhouse.
El manager Ron Gardenhire declaró después del duelo que el aragüeño se encontraba «devastado» por la inesperada situación. Cabrera buscaba en ese turno el hit que le permitiera igualar los 2.677 de Luis Aparicio, dueño del segundo lugar de todos los tiempos en la expedición nacional en las Grandes Ligas.
«Es un día muy triste para nuestro equipo», dijo Gardenhire, citado por el sitio Michigan Live. «El es un jugador especial y una persona especial. Es un tremendo golpe. Me siento terrible por él».
Cabrera se fue a la cueva con un turno fallado y un boleto en la jornada, su última en 2018. De esa manera, deja promedios, de .301/.397/.451, pero únicamente pudo disputar 38 de los 67 cotejos de los bengalíes debido a dolores en varias partes del cuerpo, incluyendo la corva, la cadera y la parte baja de la espalda.
El diario Detroit News informó que el inicialista fue sometido de inmediato a una resonancia magnética en el Comerica Park para determinar el alcance de la molestia. El portal The Athletic adelantó que se trataba de una distensión en el tendón del bíceps izquierdo.
El Nacional
