En sus seis primeros meses como presidente de la Federación Internacional de Tenis (FIT), David Haggerty ha tenido que lidiar con acusaciones de arreglo de partidos y corrupción, el caso de dopaje de Maria Sharapova y disputas sobre el monto de los premios pagados a hombres y mujeres.
“Hay algunas cosas que han sucedido que desviaron mi atención de mi misión general”, dijo Haggerty. “Pero en toda polémica hay una oportunidad”.
Haggerty, expresidente de la federación de tenis de Estados Unidos, fue elegido en septiembre para suceder al italiano Francesco Ricci Bitti como líder del organismo rector del deporte a nivel mundial. El único estadounidense que dirige una federación olímpica internacional se ha mantenido alejado de los reflectores desde que detonaron las polémicas.
En una entrevista exclusiva y abarcadora con The Associated Press, Haggerty dijo que está empeñado en proteger la integridad del tenis. Indicó que espera reforzar los sistemas para prevenir e investigar el amaño de partidos, fortalecer el programa antidopaje, y tomar medidas contra cualquier jugador que utilice meldonio, una sustancia prohibida este año y que fue responsable por el caso de dopaje de Sharapova.
“Queremos asegurarnos que todos los consumidores y espectadores tengan la certeza de que el tenis es un deporte limpio, porque lo es”, indicó.
La corrupción se robó titulares durante el Abierto de Australia en enero, cuando la BBC y Buzzfeed publicaron que las autoridades del tenis habían ocultado evidencia sobre arreglo de partidos, y que no habían investigado adecuadamente posibles casos de arreglos de partidos que involucraban a 16 jugadores ubicados entre los primeros 50 puestos del ranking mundial en la última década.
Esos reportajes provocaron que los organismos rectores del tenis realizaran una evaluación independiente sobre el grupo anticorrupción del deporte, llamado Unidad de Integridad del Tenis, un proceso que se espera que demore al menos un año.
“Cuando surge la lacra del arreglo de partidos, creemos que es una oportunidad para poder evaluar las cosas que estamos haciendo y que hemos hecho”, dijo Haggerty. “Puedo asegurarte que la Unidad de Integridad del Tenis investiga cada una de las alertas de sospechas que ocurre, hasta que tenemos evidencia para procesar o averiguamos que no había problema”.
“Tenemos que evaluarlo todo en su justa perspectiva. Estamos hablando de 246 reportes de patrones inusuales de apuestas el año pasado, de un total de 120.000 partidos de tenis. El porcentaje es pequeño. De todas formas, no tenemos tolerancia. Incluso un caso es demasiado. Pero esos patrones inusuales de apuestas no significan que algo ocurrió, no tenemos la evidencia”.
Haggerty indicó que la federación trabaja para mejorar la educación entre los jugadores de las categorías juveniles para advertirles sobre el peligro de amañar partidos. La Unidad de Integridad del Tenis contrató más personal, incluyendo un analista y un investigador, y la FIT creó su propio departamento independiente de integridad.
“Siempre hay cosas que se pueden mejorar”, afirmó el dirigente.
Sharapova anunció este mes que arrojó positivo a meldonio en el Abierto de Australia. La droga, desarrollada en Letonia para el tratamiento de condiciones cardíacas, fue prohibida por la Agencia Mundial Antidopaje el 1 de enero. La tenista rusa admitió que no leyó un aviso sobre la prohibición de la sustancia, y argumentó que la utiliza desde hace 10 años por varias condiciones médicas.
Sharapova está suspendida provisionalmente, en lo que se realiza una audiencia disciplinaria, y podría encarar una larga sanción.
“Creo que esto demuestra que el tenis no considera que ningún jugador está por encima de la honestidad del deporte”, dijo Haggerty. “Si cualquier jugador tiene esta sustancia en su sistema, se detectará y tomaremos las medidas apropiadas”.
El tenis ha sido criticado por su programa antidopaje, y algunos jugadores, especialmente Roger Federer, se han quejado de que no se realizan suficientes controles.
“Es algo que se hace de arriba abajo, así que quizás no se les realizan pruebas todo el tiempo, pero sí hay un proceso riguroso, desde los principales jugadores hasta los de menor ranking, durante y fuera de las competencias”, afirmó Haggerty.
La FIT está en el último año de un programa antidopaje de cuatro años, en el que “básicamente estamos duplicando” la cantidad de pruebas, dijo. Según las estadísticas de la federación, en 2015 se analizaron un total de 4.433 muestras, incluyendo 1.658 muestras de sangre recopiladas fuera de competencias.
“No es necesariamente la cantidad, es la calidad de lo que haces”, sostuvo.
El líder de la federación reiteró su apoyo a que los hombres y mujeres reciban premios iguales, luego de los comentarios del ahora ex director del torneo de Indian Wells, Raymond Moore, de que las tenistas mujeres se benefician del éxito de sus colegas hombres. Novak Djokovic también insinuó que los hombres merecen premiso mayores, aunque después retractó sus comentarios.
Al destacar que el US Open fue el primer Grand Slam que pagó premios iguales hace más de 30 años, Haggerty destacó que “creemos en la igualdad de género. Es muy importante. Las mujeres aportan un gran entretenimiento, gran calidad, al igual que los hombres. Ambos deben ser compensados equitativamente por lo que hacen”.
Vía AP/www.diariorepublica.com