“Convencido de que mi país es capaz de todo (…) Vamos a dar hasta el alma por nuestra selección”. Así reza el perfil de César Farías en su cuenta de twitter (@dtcesarfarias). En sus palabras, ya en el cara a cara, el seleccionador nacional habla en la misma sintonía. En la víspera del crucial partido de hoy ante Chile, el entrenador de la Vinotinto transmite confianza. Se pasea por el lobby del Hotel Intercontinental con paso firme, a sabiendas de que su grupo está tan convencido como él de que clasificar al Mundial es una opción factible.
“Venezuela ha vivido distintas etapas. Antes jugaba por sacar resultados en un partido, luego jugó por un sueño y ahora juega por un objetivo real. Y por eso hay mayor exigencia”, comenta Farías, quien a sus 40 años, luce convencido, con mayor convicción que en 2008 cuando se hizo cargo del combinado patrio.
La cordillera de los Andes luce imponente desde el césped del estadio Nacional de Santiago, donde hoy Venezuela se jugará la vida. Y así de enorme es la ilusión que se respira en el cuerpo técnico de la Vinotinto. “Estamos bien. Gracias a Dios, nuestros jugadores pudieron hacer una buena pretemporada, un buen arranque de los torneos. Estamos conscientes, somos un equipo con experiencia, con jugadores que están en el apogeo de sus carreras”, afirma el oriundo de Güiria. “Sabemos que enfrentamos a un rival duro, pero tenemos deseo y sabemos lo que está pasando a nuestro alrededor”.
Antes que pensar en Arturo Vidal, Alexis Sánchez y compañía, Farías mira para adentro y confía en la firmeza de Oswaldo Vizcarrondo, la pegada y experiencia de Juan Arango y el olfato goleador de Salomón Rondón. “Imagino un partido intenso, difícil, pero esos son los encuentros que dan mayor orgullo jugarlos para conseguir cosas importantes. Chile es una gran selección, los números lo dicen. Pero nosotros tenemos con qué jugar”, sostiene.
El problema estomacal que sufrieron varios jugadores criollos ha quedado en el pasado. Tampoco el ambiente hostil que se encontrarán esta noche en el coloso de Ñuñoa ni las condiciones climáticas adversas serán un pretexto. “En las eliminatorias uno debe adaptarse a cualquier situación: a jugar en la altura, en el llano, con calor”, dice Farías. “El frío y la lluvia no son excusas, y nuestros jugadores juegan alrededor del mundo y están acostumbrados a eso”. La fe y la convicción de la Vinotinto son enormes, como la cordillera de los Andes, a la que ni el mayor de los temporales puede opacar.
Las frases de la fe
“El mensaje hoy en la Vinotinto es que no le tengamos miedo a nada ni a nadie. Solo fe y convicción”
“Estamos convencidos de que en estos partidos ante Chile y Perú tenemos que dar rienda suelta a la creatividad”
“Sabemos a lo que nos enfrentamos y estamos decididos. Vamos con el alma ante Chile y Perú. Sabemos lo que significa estar en el Mundial y queremos darle esa alegría única a Venezuela”
“A través de la imaginación podemos visualizar los momentos que no han sido creados y que se encuentran en nuestro interior”
“En la Vinotinto estamos espalda con espalda para luchar todos juntos como lo hicimos tantas veces y ahora más que nunca”
“En la Vinotinto también luchamos por los que nos quieren y para que ellos se sientan orgullosos de nosotros. Hemos hecho el compromiso de dar el extra en este tramo final de las eliminatorias”
“Creo en lo que hacemos y no quiero fallarle a millones de niños y niñas en el país que tienen ilusión de ver a la Vinotinto en el Mundial”
“Estoy lleno de mucha fe. Pero sé que tenemos que tener mucha voluntad en los partidos que nos quedan de las eliminatorias”.
Agencias
