GOLF/ El golfista estadounidense Tiger Woods enfrentará desde hoy una situación completamente nueva en el Campeonato de la PGA de San Francisco a la búsqueda de su décimo sexto torneo de Grand Slam, por primera vez sin aficionados en el campo. La estrella del golf, de 44 años, está acostumbrado a ser seguido por multitudes que rugen con cada uno de sus golpes inyectándole una energía especial.
Pero las restricciones por la pandemia de coronavirus impuestas desde el regreso del circuito PGA en junio harán que el primer Grand Slam de 2020 se dispute prácticamente en silencio. Woods comenzó a familiarizarse con este entorno distinto en el campo de TPC Harding Park durante la conferencia de prensa del martes, donde solo se permitió la presencia de un reducido grupo de periodistas.
«Bueno, es algo desconocido», dijo Woods preguntado sobre cómo la ausencia de aficionados podría afectar sus posibilidades. «No sé si alguien en nuestra generación ha jugado alguna vez sin aficionados en un Grand Slam», afirmó.
Woods ya experimentó el juego sin espectadores en su reaparición en julio en el Memorial Tournament de Dublin, Ohio, donde sufrió para pasar el corte y terminó en la posición número 40. Al mismo tiempo, el de California tiene el ojo puesto en el pronóstico del tiempo de esta semana en San Francisco, ya que su espalda es notoriamente vulnerable a las temperaturas más bajas que se esperan.
Simón Sánchez Vía AFP/ www.diariorepublica.com