El plan era simple, construir un muro de concreto de un metro 20 de altura, al que también le adornaría una cerca metálica blanca, para sumar en total dos metros 65. Con esta dimensión los caminantes ya no podrían observar el lago ni los barcos, y las actividades que se hicieran en El Malecón quedarían escondidas.
El miércoles comenzaron los trabajos de demolición del muro. A las 10.00 de la mañana de ayer aún quedaban, aproximadamente, 20 metros de concreto. Hoy se espera que la mirada del pueblo marabino que pasa a diario por la zona llegue directamente al lago; sin limitaciones a la visión.
Los trabajadores instalaron una cerca de ciclón, delimitación preventiva que protegerá la zona hasta que se determine qué tipo de estructura se construirá en este espacio, según declaraciones de Jairo Ramírez, secretario de Seguridad y Orden Público.
Vía La verdad