La instalación de los aires acondicionado en la Basílica de la Virgen del Rosario de Chiquinquirá abrió el debate sobre qué hacer para que el flujo del aire no se escapara por las enormes puertas de madera del frontis.
¿Abrirlas y cerrarlas, mientras entran y salen los fieles? O simplemente dejarlas abiertas, fueron alternativas planteadas. El padre Eleuterio Cueva, párroco del templo San Juan de Dios, explicó que ya existe un proyecto concreto, que fue entregado al Gobierno nacional, que consiste en levantar de piso a techo unos pórticos internos en la Basílica, que lo ubicarían justo debajo de donde va la coral.
Juan Romero, de Arquitectura Sacra, es el encargado del proyecto y explicó que se piensa cerrar el templo, pero no en su frontis original, “sino que con estos portales artísticos se va impedir que el flujo del aire, que se condensa dentro de la Basílica, se escape por las puertas originales. Con este proyecto se mantendrá el 99% del aire adentro”.
La estructura se hará en base a las cuatro columnas que se encuentran los fieles inmediatamente al entrar a la iglesia, y se elaborará de hierro, revestido de roble, con algunas aplicaciones en color verde y rojo.
“Tendrá nueve portales, apliques tallados a mano, columnas y capiteles. Además, que dispondrán de algunos escudos simbólicos de la Iglesia. En la parte superior, donde van los medios puntos, se colocarán unos vitrales con diferentes simbologías”, detalló Romero.
El diseño incluye las puertas laterales, que tendrán el mismo estilo. Las puertas serán basculantes, con una altura de 2,56 metros. Mientras que todo el pórtico tiene una altura de 5,36 metros.
“Con esta altura ellas cierran el espacio físico que necesitamos, pero con la ventaja que se pueden abrir esos portales al momento de sacar el trono de la Virgen de Chiquinquirá o en ocasiones especiales”, señaló Romero.
El presbítero Cueva indicó: “Con los aires aún queda un gran trecho de trabajo, entre ellos cómo evitar que se salga el aire. Estamos esperando la aprobación económica, porque le corresponde al Gobierno nacional su inversión”.
El sistema de aires de la Basílica se calculó para que los equipos dieran 24 mil pies cúbicos por minuto de aire fresco. Aún se espera que lleguen los dos chiller, de 150 toneladas cada uno, que según los ingenieros encargados del proyecto estiman que para finales de este mes ya estén en el Zulia este par de unidades.
“Yo soy un devota de mi Chinita, y no quisiera que cerraran las puertas de la iglesia. Sabemos que el clima en Maracaibo es muy fuerte, pero deben de idearse la manera de no cerrarla, para poder ver la Tablita”, dijo Lucía Linares, residente de Sabaneta.
El sistema de aires, explicó el párroco de la Basílica, se quiere inaugurar para el día de la solemnidad de la Virgen: 18 de noviembre. Sin embargo, resaltó que los trabajos avanzan a un ritmo adecuado y sin ningún tipo de premura.
El Instituto de Patrimonio Cultural (IPC) ya otorgó los permisos correspondientes a la instalación de la ductería interna. Esta estará colocada en la nave central del templo con una iluminación acorde al espacio.
Ya solo faltan ocho días para la gran Bajada de la Patrona del Zulia, y en el templo mariano están terminando de coordinar el inicio de las fiestas en honor a la Chinita. El próximo jueves 27, a las 6:00 de la tarde, se realizará el beso de bienvenida del pueblo a la Virgen de Chiquinquirá.
Vía Panorama/www.diariorepublica.com