Desde tempranas horas del lunes 18 de noviembre, comenzaron a llegar los devotos a la Plazoleta de la Virgen de Chiquinquirá, para celebrar la eucaristía de los 310 años de la aparición de la Reina Morena, quien sigue llenando de bendiciones y esperanza al pueblo zuliano
A este acto religioso que une a todo el pueblo con un fuerte lazo de devoción mariana, asistió el alcalde bolivariano de Maracaibo, Willy Casanova, entre otras autoridades municipales y regionales, todos para recibir la bendición de la Virgen de Chiquinquirá.
Correspondió a monseñor Mariano Parra, arzobispo de la ciudad de Coro, presidir la eucaristía, pues el arzobispo de Maracaibo, monseñor José Luis Azuaje, no pudo hacerlo debido al fallecimiento de su madre en horas de la madrugada del pasado domingo 17 de noviembre.
Parra dijo en la misa que el pueblo maracaibero y zuliano durante 310 años nunca ha dejado de cantar las maravillas y milagros que la Virgen de Chiquinquirá ha hecho por su pueblo.
*Devoción del pueblo*
Henry Michelena, de la parroquia Santa Lucía, asistió para pagar una promesa a la virgen.
«Mi hija tenía neumonía con derrame pleural… me decían que la iban a operar, que tenían que hacerle un raspado al pulmón, que quizás no habría mejoría… mi esposa y yo nos aferramos a La Chinita y no hubo necesidad de hacerle nada, ella mejoró», dijo Henry, con un nudo en la garganta, en compañía de su esposa e hija
Además pidió a la virgencita mucha salud para su hija de 4 años, pues «lo demás llega producto del esfuerzo y por añadidura», agregó Henry.
El joven Andrés Caldera, de 21 años quien habita en la parroquia Manuel Dagnino, pone todas sus fuerzas y oraciones para que la Virgen Chiquinquirá lo escuche y sane de su enfermedad renal. «Yo creo mucho en ella, pues es milagrosas y protectora de todos», dijo Andrés.
También pidió a la madre de Jesús de Nazaret, bendiciones para toda su familia y para que el país siga mejorando y salga adelante.
La señora Elsa Cortés, de 71 años de edad, llegó a la plazoleta desde la parroquia Cacique Mara. Aseguró que la Virgen Chinita es la madre espiritual de todos los maracaiberos y zulianos, hasta en los que no creen en la religión, pues ella protege a todos con su manto. «Le pido a la virgencita salud para todos… por la paz y la tranquilidad de Venezuela», añadió Elsa.
La señora Julia Blanco de Urdaneta, viaja desde hace 20 años desde San Carlos de Cojedes, para celebrar la feria y la eucaristía. «La Virgen Chiquinquirá ha sido misericordiosa conmigo… cuando tengo un problema rezo y le pido y ella me concede su bendición», aseguró Julia.
Jairo Agámez, llegó con flores desde el municipio San Francisco, para entregarlas como ofrenda a la madre de Dios, pues ella le hizo un milagro, «yo tenía líquido en la rodilla… el dolor era insoportable, no podía caminar, ni hacer nada, comencé a orar y no me tuvieron que drenar la pierna, eso se me quitó solo y no me ha dado más», describió Jairo.
Kenyerlis Valero de 12 años de edad, es devota gracias a su padre y madre quienes la guían por el camino de Dios, la adolescente le pide a la Patrona de los zulianos mucha salud para sus padres y que la cuide.
Via Nota Prensa/Diario Republica
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