
“La crisis presupuestaria de la Universidad del Zulia la anunciamos en 2011, cuando el Gobierno nacional asignó nuevamente el monto similar al de los últimos cinco años; es insostenible el funcionamiento institucional cuando se descarta el anteproyecto propuesto al Ejecutivo y se repite la fórmula de utilizar como mecanismo para cubrir las insuficiencias, el crédito adicional”, dijo la vicerrectora Administrativa, María G. Núñez.
“La reconducción presupuestaria obligó a orientar el gasto institucional, sujeto a cubrir las insuficiencias (previa recomendación de los técnicos de la Oficina de Planificación del Sector Universitario) por la vía del crédito adicional; al agotarse la partida de varios servicios se solicitó –formalmente- el 8 de junio de 2012 los respectivos auxilios financieros el pasado mes de junio”, aclaró la titular de las finanzas.
Sin embargo, hasta el momento no se tiene respuesta sobre los recursos solicitados, con el agravante que se agotaron partidas destinadas a cubrir compromisos laborales y servicios importantes para el funcionamiento de la institución. El problema lo genera la política de financiamiento desarrollada por el Gobierno nacional en los últimos años, al aprobar los créditos adicionales para cubrir beneficios y otros conceptos en el último semestre del año, eso ocasiona atrasos, afecta la planificación, genera esfuerzos extras en el personal responsable de elaborar nóminas (por ejemplo) y la rendición de cuentas debido a la forma como se entregan los dineros, advirtió Núñez.
El último crédito adicional de 2011 llegó faltando pocos días para finalizar el año, los recursos fueron utilizados luego de entrar de vacaciones en enero de 2012, provocando un gran atraso en la posibilidad de generar la rendición de cuenta por los distintos conceptos exigidos por el Ministerio de Educación Universitaria-Opsu, aclaró la Vicerrectora Administrativa de LUZ.
Y la academia?
El jueves 12 de julio de 2012, la comisión nombrada por el Consejo Universitario, integrada por los gremios y las autoridades de LUZ, planteará a la ministra de Educación Universitaria, Marlene Yadira Córdova, el “status” de las insuficiencias presupuestarias y los auxilios financieros solicitados para cubrir los bonos Salud, Familiar y de Alimentación, y solicitar información sobre el envío del resto del Bono Vacacional que la Opsu anunció se entregarían antes del 16 de julio, detalló Núñez.
El martes 10 de julio de 2012, la Asamblea Nacional aprobó ocho (8) créditos adicionales y no incluyó ninguno para las universidades, informó la Vicerrectora Administrativa, esa es una muestra de la disposición que tiene el Ejecutivo para solventar los compromisos que tiene con la comunidad universitaria, específicamente para atender los compromisos de tipo social y laboral.
En junio de 2012, el Gobierno nacional autorizó la entrega de Bs.20 millones distribuidos en 60% para providencias institucionales y el 40% restante para los gastos de funcionamiento, sin embargo, no se destinó nada para cubrir las partidas agotadas, especificó Núñez.
La imposibilidad de pagar los bonos de Alimentación, Salud y Familiar, de los empleados, obreros y docentes (activos) se debe al agotamiento de la partida programada en el presupuesto 2012, explicó la titular de las Finanzas de LUZ. A los profesores jubilados se les puedo pagar porque en los recursos centralizados por la Opsu para cubrir el 40% del incremento salarial, decidieron incluir este beneficio de los profesores que se aprobó recién en 2011y al recibir los recursos hay que hacer el pago de inmediato.
El bono de los profesores se aprueba en 2011 y no se incluye en el Presupuesto 2012, explica Núñez, mientras a los empleados y obreros jubilados se les aprobó en 2009 y sí se incorporó; por esta razón, se pagó este beneficio, pero hay que destacar el trato injusto con los docentes jubilados a quienes se les reconoció dos años después, incluso hasta el presente no se le ha aprobado la Prima de Hogar, que ya se le dio al resto de los trabajadores.
Para la Vicerrectora Administrativa de LUZ al aspecto laboral se le agrega el deterioro de la infraestructura de LUZ; en momentos cuando se admite la mayor cantidad de estudiantes y se suman 64 mil alumnos aproximadamente, no se ha construido ni un metro cuadrado de edificación adecuada y la innovación tecnológica se ha hecho lentamente; “el asunto es luchar por todos los aspectos sociales de la comunidad universitaria, sin olvidar que somos una institución académica y necesitamos garantizar su calidad para mantenernos vigentes”.
Nota de Prensa LUZ/Hugo Delgado