Robert Ronny Ríos Medina, de 25 años, cayó a balazos anoche a cuatro cuadras de su casa. Se dirigía su hogar, en la invasión Carolina de Pérez, vía a La Rinconada, donde lo esperaban su esposa y dos hijos de cinco y nueve años.
Varios sujetos lo emboscaron, lo tirotearon y lo dejaron en la vía pública al regresar de su trabajo como escolta para licores Limorca, en el sector Las Tarabas. Según relató su padre, Roberto Ríos, los asesinos lo despojaron de sus pertenencias, incluido su armamento de servicio.
Compañeros de trabajo asomaron que la posible causa del suceso fue un altercado que tuvo el infortunado con unos vecinos. «Fue un asunto con su comadre que vive al lado. Él discutió con unos tipos por algo de un tubo de agua y como que se la juraron».
Sus familiares esperan la entrega del cuerpo en la morgue de Maracaibo, para efectuar los ritos fúnebres y la sepultura.
Redacción DiarioRepublica.com