En total 58 personas, entre ellas 36 niños, murieron el viernes en Alepo (norte) por la explosión de tres misiles tierra-tierra lanzados por las fuerzas del régimen, según un nuevo balance del Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH).
Varios cuerpos de mujeres y niños fueron retirados de los escombros el sábado en el barrio de Tariq Al Bab, por lo que el balance ha sido revisado al alza, precisa la organización con sede en Gran Bretaña, que recaba su información de una vasta red de militantes y médicos en el país.
Según unos militantes, los misiles -Scud- fueron lanzados desde la base militar ‘155’, situada en la región de Damasco. Esta información no ha podido ser verificada con fuentes independientes.
El ejército trata de recuperar los barrios del este de Alepo, que están prácticamente bajo control rebelde, según el opositor OSDH.
El sábado, al menos 110 personas -46 civiles, 35 rebeldes y 29 soldados- perdieron la vida por la violencia en el país, según el OSDH.
Vía AFP
