
A propósito de la celebración, este 2 de febrero, del Día Mundial de los Humedales, el Secretario de Ambiente del Gobierno Regional, Lenín Cardozo, señala que el valor de los mismos viene dado porque “son la interfase entre los ecosistemas terrestres y acuáticos y presentan características de ambos, conjugadas de tal forma que propician y sostienen el desarrollo de una gran biodiversidad”.
Para una mayor comprensión del tema se entiende por «humedal», según el Convenio de Ramsar, una zona de la superficie terrestre que está temporal o permanentemente inundada, regulada por factores climáticos y en constante interrelación con los seres vivos que la habitan.
El biólogo Alfredo Soler, adscrito al Ministerio de Ecosocialismo, Hábitat y Vivienda, agrega que “el término humedal implica una amplia variedad de hábitats, desde ambientes de ciénagas, bosques inundables y otros sitios anegadizos, como manglares a lo largo de las líneas costeras tropicales, hasta ambientes que se ubican justo por debajo de la línea sur del Ártico”.
“En los humedales es común la presencia de agua, con suelos hídricos o saturados y vegetación adaptada a condiciones húmedas; poseen alta productividad biológica, almacenan aguas superficiales, recargan y descargan aguas subterráneas, purifican el agua: retienen nutrientes, sedimentos y contaminantes. Así mismo, estabilizan costas y controlan la erosión, conservan la biodiversidad, reducen el impacto de las inundaciones, son fuentes de pesca artesanal y comercial, albergan flora y fauna aprovechables, permiten el transporte fluvial, son centros de recreación y turismo, poseen valores estéticos y espirituales”.
Cardozo es enfático al afirmar que el estado Zulia es privilegiado por sus inmensas extensiones de humedales, destacándose “el Parque Nacional Ciénagas de Juan Manuel de Aguas Blancas y Negras, al sur del Lago de Maracaibo con 269.400 hectáreas, donde nace el Relámpago del Catatumbo, y el Refugio de Fauna Silvestre y Reserva de Pesca Ciénaga de Los Olivitos, al noreste del Lago de Maracaibo, con un estimado de 26.000 hectáreas de superficie. Este es el hábitat de más de 130 especies de aves, muchas de ellas acuáticas, y del reconocido Flamenco (Phoenicopterus Ruber), de los cuales se han registrado hasta 100.000 individuos en temporada de reproducción”.
Otra gran extensión de humedales en la región, se encuentra a lo largo de la desembocadura del Río Limón, con una superficie de bosques de manglar de 15.400 hectáreas, correspondientes al 22.9% del área total de manglares venezolanos. Ecosistemas muy importantes para el quehacer académico, científico y turístico.
“Haciendo una justa valoración de los humedales de manglares, la Gobernación Bolivariana del Zulia impulsa la declaratoria como Parques Ecoturísticos de sus principales caños o canales, iniciativa que busca fortalecer la protección de estos tesoros naturales y ofrecerle al país y al mundo su gran potencial”, indica el Secretario de Ambiente.
Entre los caños de manglares zulianos se destacan Paijana, La Enea, (en el Municipio Guajira); La Tigra, en el Municipio Mara; La Cañonera y Maraca (Municipio Insular Padilla); los Caños Viejo y Nuevo dentro del Refugio de Fauna Silvestre y Reserva de Pesca Ciénaga de Los Olivitos (Municipio Miranda) y el Caño La Maroma en el Municipio Colón.
Nota de prensa Sec.Ambiente / www.diariorepublica.com