«El gobierno del Reino de España ha extralimitado el debido respeto a la República Bolivariana de Venezuela, su gobierno y su pueblo», aseguró en otro trino.
Maduro acusó este martes al Gobierno español de «apoyar al terrorismo» en Venezuela y de formar parte de una «conjura internacional» para derrocarlo y calificó a su homólogo español de «bandido».
Además aseguró que frente a lo que calificó de «agresión» contra Venezuela ya tenía preparada «una respuesta muy contundente» de la que no dio mayores detalles y que sería tomada «en el momento preciso».
La canciller venezolana, en su cuenta en la red social, recordó que desde Caracas «ya habíamos advertido a su Canciller (español) sobre el debido respeto a Ntra Patria. No permitiremos que un gobierno extranjero se inmiscuya en Vzla».
El embajador español en Caracas, Antonio Pérez-Hernández y Torra, fue convocado por la cancillería venezolana el pasado día 15, un día después de que el Congreso de los Diputados español aprobara una resolución a favor de la liberación «inmediata» de varios opositores encarcelados.
A la salida de la reunión la jefa de la diplomacia venezolana informó de que se llevaría a cabo una revisión «exhaustiva» de las relaciones con España por orden de Maduro.
Tras las últimas declaraciones del jefe del Ejecutivo venezolano y la decisión del parlamento venezolano de declarar persona «non grata» a Felipe González, el ministro español de Asuntos Exteriores, José Manuel García-Margallo, anunció hoy que ha llamado a consultas al embajador en Caracas.
«Los calificativos que utilizan las autoridades son absolutamente intolerables y teniendo en cuenta el grado de irritación verbal de Maduro he decidido convocar a consultas al embajador en Caracas», aseguró García-Margallo en declaraciones a periodistas.
Vía ÚN / www.diariorepublica.com