Menos de 48 después de un terremoto y un tsunami que dejó 13 muertos en las Islas Salomón una violenta réplica vuelve a sacudir la zona. Pánico en la población, mientras los rescatistas mantienen activas sus operaciones. 20 aldeas desaparecieron de la faz.
La Agencia AFP, con periodistas en el sitio, narra la historia:
Un terremoto de magnitud 7,1 se produjo este viernes frente a las Islas Salomón, dos días después de que un fuerte terremoto causara 13 muertos y devastara los pueblos costeros de este archipiélago del Pacífico, señaló el Centro Geofísico de Estados Unidos (USGS).
Esta vez no hay riesgo de que se produzca un fuerte tsunami, aseguró inmediatamente el Centro de alerta de tsunamis del océano Pacífico.
El movimiento telúrico se produjo este viernes a las 11H12 GMT cerca de las costas de las Islas Santa Cruz, que pertenecen a las Salomón, a una profundidad de 9 kilómetros, según el USGS.
Este viernes, varias réplicas frenaron las operaciones de socorro en las Islas Salomón, después del terremoto de magnitud 8, seguido de un maremoto, que dejó al menos 13 muertos y numerosos desaparecidos.
Unas 20 aldeas fueron borradas del mapa y cerca de 6.000 personas perdieron sus viviendas en Ndende, que forma parte de esas islas del Pacífico situadas al nivel del mar, con un relieve moderado, amenazadas por la crecida del océano.
«Primero pensamos que serían bastante limitados, pero ahora parece que los daños son muy importantes», explicó a la AFP Sipuru Rove, portavoz de la agencia de gestión de catástrofes naturales de las Islas Salomón. «Podríamos necesitar ayuda exterior», agregó, mientras Australia comenzaba a movilizar medios financieros y materiales.
«Muchas personas más están en la lista de desaparecidos», precisó el ministro de Relaciones Exteriores autraliano, Bob Carr, que anunció una ayuda de 300.000 dólares australianos (230.000 euros) y el envío de un avión Hércules de la aviación de su país, visitará el lugar el próximo domingo.
Las réplicas impiden que los aldeanos regresen a sus hogares para salvar lo que pueda ser rescatado y perturban considerablemente el envío de ayuda de urgencia. «Ellos bajan a la aldea, pero en cuanto hay una réplica se apresuran a volver a las colinas, por miedo a otro tsunami», declaró Sipuru Rove.
Un avión que transportaba al primer ministro de las Islas Salomón, Gordon Lilo, tuvo que renunciar a aterrizar en Ndende, pues las autoridades temían que la pista estuviera deteriorada después de una réplica que tuvo lugar mientras el aparato volaba hacia la zona.
Equipos médicos y material de emergencia (carpas, agua potable, paquetes con alimentos y ropa) fueron enviados por barco desde Honiara, la capital, el jueves, y probablemente llegarán este viernes al anochecer o el sábado.
Vía AFP