
La Cámara de Casación Penal convalidó este viernes la validez de la investigación abierta contra el vicepresidente argentino, Amado Boudou, en la causa por la supuesta compra irregular de una imprenta por parte de un amigo suyo.
De esa manera se rechazó el pedido de nulidad planteado por Alejandro Vandenbroele, señalado por la acusación de ser testaferro de Boudou en el caso de la quiebra de la imprenta Ciccone.
La Justicia busca aclarar si Boudou, cuando era ministro de Economía, intercedió irregularmente en la compra de la empresa impresora de dinero, que quebró antes de pasar a manos del Estado.
El tribunal pidió que se sigan investigando los lazos de Vandenbroele con el vicepresidente Boudou y su socio José María Núñez Carmona. Además, ratificó la declaración de la exesposa de Vandenbroele, Laura Muñoz, para quien se pidió protección.
Boudou ha negado conocer a Vandenbroele, a pesar de que éste pagaba ciertos gastos de un departamento a nombre suyo en el barrio de Puerto Madero.
El vicepresidente, quien está a cargo del poder Ejecutivo desde que la presidenta Cristina Fernández de Kirchner fue operada de un hematoma craneal, es investigado por negociaciones incompatibles con la función pública y enriquecimiento ilícito.
Agencias