
La compañía privada aeroespacial Space X, fundada por el empresario Elon Musk, autor de diseños con tecnológicos con tecnología Tesla, lanzará por primera vez en la historia de la industria un satélite utilizando utilizando un cohete ya usado.
La prueba será desde Cabo Cañaveral, Estados Unidos y utilizará parte de su cohete Falcon 9 que había volado inicialmente en abril de 2016.
El artefacto, de 41 metros de altura, aterrizó suavemente minutos después del despegue sobre una plataforma flotante sobre el océano, frenando y guiando su rápido descenso en la atmósfera con sus motores.
El plan del proyecto será recuperar estos tanques, reacondicionar las partes dañadas y llenarlos de combustible de nuevo es mucho más barato que construirlos desde cero.
En el futuro del proyecto se espera poder recuperar el segundo tanque que llega a órbita, o convertirlo todo en una sola unidad que despegue y aterrice de forma continuada, como un avión.
Vía Globovisión/www.diariorepublica.com