
El tenista griego Stefanos Tsitsipas, número 6 del mundo, derrotó al ruso Daniil Medvedev (2º) por 6-3, 7-6 (7/3) y 7-5, este martes, y jugará una de las semifinales de Roland Garros frente al también jugador top, el alemán Alexander Zverev (5º). El de Grecia, de 22 años, se clasificó de esta manera para su segunda semifinal consecutiva en el torneo parisino.
«Me enfrentaba a uno de los mejores jugadores del circuito. Tuve que mantener la intensidad y elevar mi nivel e juego a lo largo del partido. No le dejé muchos espacios, es uno de mis mejores partidos de la semana, estoy muy contento. Jugar en tierra batida en París me trae buenos recuerdos, espero llegar todavía más lejos», declaró.
La victoria del griego puede considerarse lógica, no en vano, es el tenista que más partidos ha ganado este año (38) y en la temporada de tierra ha logrado los títulos en Montecarlo y Lyon.
Medvedev, de 25 años y quien hasta esta edición nunca había ganado un partido en Roland Garros, demostró que hizo muchos progresos en la tierra batida, pero aún le queda mejorar frente a especialistas como Tsitsipas.
El griego restó mejor (43 restos ganadores por 27 para el ruso) y cometió menos errores no forzados (24 a 44), mostrándose más sólido con su juego, especialmente en los momentos claves. Tsitsipas comenzó mejor el partido, quebrando el servicio de su rival en el cuarto juego del partido (3-1) para conservar la ventaja y cerrar la primera manga en 6-3 en apenas media hora de encuentro.
En el segundo set, el de Atenas volvió a romper el servicio del raquetista eslavo en el tercer juego, pero Medvedev, que ha demostrado en este Roland Garros sus enormes progresos en tierra batida, pudo conseguir su primer ‘break’ para empatar el parcial (3-3) y ambos tenistas conservaron el servicio hasta el ‘tie break’.
Pese a la mayor oposición de Medvedev, a Tsitsipas no le tembló el pulso y se colocó con dos sets de ventaja ganando claramente el ‘tie-break’ (7/3).
Casi dos horas le costó a Medvedev romper el servicio de Tsitsipas, pero lo logró en el 6º juego del tercer set para colocarse por primera vez con ventaja en el marcador (4-2).
Pero la intención del ruso de extender el partido acabó pronto, ya que el griego, de 22 años, le devolvió el ‘break’ en el juego siguiente (en blanco además), para rompérselo de nuevo en el 12º partido y cerrar el juego en 2 horas con 19 minutos.
Vía AFP/Diario República
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