

Al menos mil seiscientas piezas entre medallas, banderas e imágenes provenientes de 22 países del mundo fueron colocadas en el precioso manto que luce la virgen durante este año.
Las ofrendas de acrílico, mdf o metal precioso con un tamaño máximo de cuatro centímetros fueron recolectadas en el exterior por un gran equipo de voluntarios que posteriormente entregaron las piezas a la Basílica Nuestra Señora de Chiquinquirá.
“Nosotros hemos visto durante este año desfilar frente a la imagen de la virgen una inmensa cantidad de hombres y mujeres de familias, de niños, de adolescentes y jóvenes que han venido a despedirse a pedirle la bendición a La Virgen…Por eso tuvimos la idea de confeccionar este manto con la mapa mundis y luego rellenarlo con las inmensas cantidad de medallitas , de banderas, de dijes, de imagen, de logos que ellos enviaron de diferentes partes del mundo y que es un signo de la universidad de la comunicación…Queremos decirles que están aquí muy cerca del corazón de la virgen del pueblo zuliano y sobre todo de Venezuela”.
El manto celestial fue confeccionado por el zuliano Juan Carlos Villasmil quien junto a un grupo de colaboradores vistieron a la virgen morena, esta vez la santa patrona lleva muy de cerca la presencia y el recuerdo de quienes están lejos de la tierra del sol amada.
Luego de estas actividades el pueblo zuliano tendrá la oportunidad de acompañar a la virgen en la procesión de la aurora la cual se realizara el próximo tres de diciembre, la misma recorrerá algunas calles del municipio Maracaibo durante unas siete horas.
Vía Venevision/www.diariorepublica.com