El asesinato de Leidy Bacallao, de 17 años, ha conmocionado e indignado a Cuba.
A la crueldad del ataque y los más de 30 años de diferencia entre el presunto asesino y su víctima se suma el hecho de que ocurrió en una comisaría de policía.
Sucedió en la madrugada del sábado en la ciudad de Nuevitas, en la provincia central de Camagüey, a unos 500 km al este de La Habana.
«Un individuo de 50 años de edad, de pésima conducta social y con múltiples antecedentes penales, ultimó con el empleo de armas blancas a su expareja de 17 años de edad, quien buscaba resguardo en la subestación de la Policía Nacional Revolucionaria de la comunidad», menciona el comunicado oficial del Ministerio del Interior, sin aportar más datos.
Vía BBC/www.diariorepublica.com