No tener una ‘jugosa’ remesa, producto del trabajo de todo un día, le costó la vida a un chofer de la línea Campo Mara-Maracaibo. Dos delincuentes le dispararon a Elvis Carvajal Ochoa, de 37 años, dentro del bus que manejaba, delante de sus pasajeros.
El asesinato ocurrió en el sector La Sierrita, en el municipio Mara, el domingo a las 7:00 de la noche.
Testigos contaron que los dos asaltantes se montaron en el CDI de La Sierrita, en esa jurisdicción, y a los pocos metros sacaron sus pistolas. Apuntaron a todos y despojaron a los usuarios de sus pertenencias. Luego le pidieron el dinero a Carvajal y ocurrió la desgracia. Un hijo del chofer vio todo, era el colector de la unidad.
“Elvis les entregó el dinero que tenía en ese momento; sin embargo, ellos le exigían más: ‘Dame el resto de la plata que tenéis guardada o te mato’, le decía uno de los ladrones. Él les dijo que eso era todo lo que llevaba y por eso lo mataron”, narró su primo Iraldo Ochoa, desde la morgue de LUZ.
El transportista recibió el impacto de bala en la sien derecha y murió en el acto, encima del volante. Los hampones se bajaron y corrieron, logrando así huir del sitio.
El hijo de Elvis trató de ayudarlo, pero el bus impactó contra una pared y luego cayó a una cañada.
Tras escuchar los disparos, los gritos de terror de los pasajeros alertaron a los residentes del lugar, quienes se acercaron para auxiliar. Más allá del susto, los usuarios de la unidad resultaron ilesos.
Ese era el último viaje que realizaría Elvis, pues ya era tarde y no le gustabatrabajar de noche por la inseguridad en la zona.
Al lugar se presentaron efectivos del Cpbez para resguardar la escena. Luego llegaron los detectives del Cicpc para recoger las evidencias y testimonios.
El cuerpo del hombre fue levantado por la policía científica y trasladado a Maracaibo para la necropsia.
Sus parientes indicaron que la semana pasada también lo habían asaltado y desde entonces decidió guardar, durante el día, parte del dinero con el que costeaba los gastos de sus 12 hijos y mantener a su esposa, quien tiene siete meses de gestación.
Ochoa manifestó que su primo tenía dos meses trabajando en el bus que había alquilado, pero desde hace ocho años se dedicaba a ser chofer de tráfico. Era el mayor de cuatro hermanos y vivía en Campo Mara. El cuerpo será enterrado en el cementerio de El Moján.
El pasado 7 de julio en la noche, unos asaltantes también asesinaron a Álvaro Ferrer Granadillo (29) quien era docente universitario y en su tiempo libre se dedicaba a trabajar en el tráfico, en la ruta El Moján- Maracaibo. Los hombres también se subieron a a la unidad como pasajeros, pero en medio camino lo sometieron para robarle el Malibú.
Como se resistió, le dispararon en el pecho, lo abandonaron en Tamare, municipio Mara, y se llevaron el vehículo, que luego abandonaron cerca de un peaje.
Vía Panorama/www.diariorepublica.com
