Mientras descubren la cura absoluta y definitiva para este mal que afecta tantas vidas, lo mejor que podemos hacer es valernos de aquellos alimentos que tienen nutrientes y propiedades curativas tan fuertes que son capaces de reducir el riesgo de padecer cáncer.
Se han hecho varios estudios que relacionan la disminución de células cancerígenas con la ingesta de una alimentación basada en plantas: hortalizas, frutas y legumbres cuya composición química ayuda al vencimiento de esta enfermedad.
Es importante que trates de consumir entre cinco y nueve porciones de frutas y vegetales, especialmente de estos seis:
Brócoli
Contiene grandes cantidades de sulforafano, un compuesto que activa las enzimas protectoras de nuestro organismo y de deshace de los químicos que causan cáncer. El sulforafano también ataca las células que ayudan a que el cáncer crezca y se expanda.
Ayuda especialmente con ciertos tipos de cáncer, como de mama, hígado, pulmón, próstata, piel, estómago y vejiga.
Frutos silvestres
Las moras, fresas, frambuesas y demás frutos silvestres son ricas en fitonutrientes, unas pequeñas sustancias capaces de protegernos del desarrollo de mutaciones cancerosas y detienen alguno que ya se haya comenzado a formar.
Perfectas para el cáncer de colon, esófago y piel. Con media taza de frutos silvestres al día, alcanzarás los resultados.
Tomate
Es una gran fuerte de licopeno, que además de ser la sustancia que le da su color rojo, también detiene el crecimiento de las células que podrían generar cáncer endometrial, que es causante de 8.000 muertes al año.
También previene el cáncer de pulmón, próstata y estómago. Si no te gusta en las ensaladas, no te preocupes, porque le sacas más beneficios al tomate cuando lo cocinas (tremenda excusa para devorarte ese plato de pasta).
Nueces
Ya sabías que las nueces aportan grasas saludables, lo que aumenta tus niveles de colesterol “bueno” y , por ende, bloquean los receptores de estrógeno en células cancerígenas, disminuyendo su velocidad de crecimiento. Con treinta gramos de nueces diarios puedes ayudar a evitar el cáncer de mama.
Ajo
No es el mejor amigo de tu aliento, pero sí de tu colon, mamas, esófago y estómago. Esto se debe a que los fitoquímicos que contiene detienen la formación de posibles carcinógenos en el sistema digestivo, cuando consumes muchos alimentos enlatados y procesados.
Granos
Las proteínas de origen vegetal reducen de manera significativa el cáncer de colon, contienen bastante fibra y te ayudan a obtener tus nutrientes de una forma más sana que si consumes proteínas animales. En vez de consumir carne tres veces por semana, intenta sustituir al menos una de ellas, por una ración de lentejas o frijoles y así poco a poco te irás acostumbrando y podrás aumentar tu ingesta de granos.
Aléjate de:
Grasas animales, como carne, quesos fuertes y mantequilla, que son altas en grasas saturadas y promueven la obesidad, que es prácticamente, la mejor amiga del cáncer. Opta por proteínas más sanas como pescado, los granos que mencionamos antes y quesos frescos.
La carne procesada, presente en salchichas y enlatados es súper nociva para tu salud en general y, como tienden a ser altos en nitritos y nitratos que los ayudan a mantenerse “frescos”, también aumentan tus riesgos de cáncer en el tracto digestivo. Ahora, no quiere decir que no te puedas comer un pedacito de tocineta o un perro caliente ocasional.’
Vía Venevisión