Este jueves santo se celebró en todo el mundo católico el primero de los misterios del triduo pascual, pilar de la fe de la Iglesia universal, la instauración de la eucaristía momento en el que se revive la promesa realizada por Jesús hace 1980 años cuando tomó el pan lo partió y lo dio a sus discípulos, diciendo: ‘Tomen y coman; esto es mi cuerpo’. Después tomó una copa, … y se la pasó diciendo: ‘Beban todos de ella: esto es mi sangre, la sangre de la Alianza que es derramada por una muchedumbre, para el perdón de sus pecados.
La Iglesia celebra además, junto a su principal sacramento de salvación, la instalación del sacerdocio como servicio para sus fieles y representantes de Cristo en la Tierra, todo esto enmarcado en el símbolo de humildad más grande realizado por los pastores católicos, el lavatorio de los pies, hermosa tradición en la que se escogen 12 miembros de la iglesia para, tal y como aparece en el evangelio de Juan 13: 2-5, lavarle los pies con agua, secarlos con una toalla ceñida a la cintura y besarlos una vez limpios.
Luego de esto, una vez que termina la eucaristía, sin dar la bendición final se desnuda el altar y se procede a llevar al Santísimo Sacramento a los monumentos, inspirados y recreados en algunos pasajes bíblicos, que según la tradición cristiana se deben visitar 7 templos para buscar la bendición de Dios, luego del peregrinar realizado.
He aquí algunas fotografías de como están los templos esperando la visita de los feligreses para la adoración, la mayoría de estos abrirá hasta las 10 de la noche de hoy, para reabrir el viernes santo desde las ocho hasta las doce del mediodía.
Herwin Godoy Briceño/Gráficas Alian Mercado, José Oscar Urdaneta, Elvy Monzant, Mariagabriela Bracho/Diario República