Definir un sistema cambiario óptimo es uno de los grandes retos de la mesa de diálogo socio económica. Sectores productivos siguen insistiendo en dar prioridad a la implementación de un sistema de cambio “único, fluido y confiable” que frene de una vez por todas al llamado “dólar negro” que influye en los precios.
En el primer trimestre de 2016, el Gobierno estableció dos tipos de cambio, uno protegido a 10 bolívares para salud y alimentos y dólar complementario dirigido al resto de los sectores, empezó en 200 y ahora está en 658 bolívares; mientras que el “paralelo” sigue en subida, actualmente tranzado sobre los 1.900 bolívares por dólar.
Cuando se autorizaron las dos tasas, las autoridades aseguraron que vendría un nuevo sistema, pero aún no se ha concretado. Ante ese desequilibrio, diversos voceros económicos plantean la necesidad de dejar un solo tipo de cambio para enfrentar las distorsiones del mercado, la compra de materia prima.
Ayer, el presidente de la Federación de Industriales, pequeños, medianos y artesanos (Fedeindustria), Orlando Camacho, destacó que la inflación en el país está siendo inducida por el conocido “paralelo”.
“El dólar internet crea inestabilidad en los precios, lo que genera una inflación inducida (…)Tenemos que romper el paradigma de ser un país de compradores a ser uno de vendedores”.
“Desde Fedeindustria apostamos por el diálogo. Hemos alcanzado un sistema de precios, un reconocimiento a los costos de los productos, vamos por la dirección correcta, pero hay que lograr que el poder adquisitivo se mantenga el mayor tiempo posible”, apuntó Camacho.
Consultado por el Diario Panorama, el presidente de Fedecámaras, Francisco Martínez indicó que, aunque esta institución aún no ha sido invitada todavía a participar en el diálogo, tienen listas varias propuestas.
Entre ellas ir a nuevo sistema de adquisición de divisas, “ uno que permita “fluidez y confiabilidad para que las empresas puedan adquirir las divisas necesarias para la adquisición de insumos que son tan necesarios para la producción de bienes y servicios hechos en Venezuela”, dijo.
“Estamos dispuestos a sentarnos con el Gobierno y la oposición, queremos estar en las mesas, que se nos escuche, sabemos que el Vaticano da pedido acelerar soluciones al problema de desabastecimiento y medicinas”, apuntó Martínez.
Desde Fedeagro, su presidente Antonio Pestana, expresó que el Gobierno tiene que apostar a la producción nacional. Explicó que “por cada dólar invertido para producir internamente, llámense agroquímicos y repuestos, nos ahorramos 5 dólares en importación directa de alimento, además de potenciar el resto de la economía”, puntualizó Pestana.
El economista Luis Vicente León, aseguró que “es más que clave resolver el esquema cambiario”. “Es obvia la crisis económica, está demolida y la raíz operativa del problemas se centra el tema de divisas, de la adquisición”.
Detalló que la estrategia del Gobierno de “importar productos y atender a otros sectores con el Clap durará poco porque ante la demanda de dólares ‘el paralelo’ seguirá en subida. Los importadores van a necesitar más divisas y esto será todo un problema, es urgente atender esta situación en el diálogo, fundamental”.
Vía Panorama/www.diariorepublica.com