Las medidas económicas anunciadas por el Gobierno este mes han golpepado duro a los comerciantes de Las Playitas y ya son usuales ver sus pasillos vacíos.
Las ventas de febrero, en comparación con el primer mes del año, han caído estrepitosamente. «A nadie ya le alcanza el sueldo para comprar otra cosa que no sea comida», dijo Ángel Quintero, comerciante.
Según los vendedores, la gente pasa, pregunta, se queja y luego se va sin comprar. «Estamos perdiendo muchos clientes porque ahora el precio de las cosas es mucho mayor, y ellos siguen ganado igual», señaló Quintero.
Los vendedores han tratado de adaptarse como pueden a la devaluación: algunos han subido sus precios un 10 por ciento, pero la mayoría registró un aumento de hasta un 50 por ciento.
El pasado 8 de febrero el gobierno anunció que el aumento del dólar de 4,30 a 6,30 por bolívar. Los voceros de la administración adujeron que la medida era necesaria para estabilizar la economía y beneficiar a los más pobres. Sin embargo, la oposición ha criticado con insistencia esta decisión.
«No solo son unos pocos quienes se han visto afectados, somos todos», dijo Zafa Checiiffi, dueña de un local.
La preocupación es general y ya muchos piensan en comeciar con otros productos que tal vez les brinden un mayor margen de ganancias.
Redacción DiarioRepublica.com
Fotos: Eduardo Galban