La alemana Angelique Kerber ha cerrado dos de la mejores semanas de su carrera, quizás de su vida. Tras mostrar firmeza fase a fase, se instaló en la final y luego de asegurarse ser la nueva número uno del mundo, este sábado completó el festejo al superar a la checa Karolina Pliskova para consagrarse como la nueva monarca del US Open.
Kerber tuvo que trabajar fuerte para superar a una destacadísima Pliskova, décima preclasificada, y tras tres intensos sets pudo saborear el éxito en el tenis femenino. Con parciales de 6-3, 4-6 y 6-4 con dos horas y nueve minutos de acción, la germana selló un triunfo sensacional en Nueva York.
Campeona en el Australian Open, finalista en Wimbledon, medallista de plata en Río 2016 y ahora campeona en el US Open, la ratifican como la mejor tenista de la temporada superando a Serena Williams, y no solo por números y por pasar a liderar la clasificación, sino también por el enorme protagonismo y entrega mostrada en cada partido.