Yulimar Rojas, campeona olímpica y plusmarquista mundial, regresó la mañana de este martes a tierras venezolanas por primera vez tras conseguir el Oro en Tokio y su conquista en la Liga Diamante.
Lo primero que hizo la criolla al llegar fue pedirle la bendición y darle un abrazo a su madre.
La atleta criolla arribó al aeropuerto internacional de Maiquetía en vuelo directo desde Estambul.
Rojas aseguró que sus triunfos son solo “el principio”, indicó que vienen muchas cosas buenas para ella y Venezuela, “muchos más diamantes y muchas medallas”, acotó la salto triplista.
Así mismo “Yuli” aprovechó para agradecer a Dios por sus logros y le envió un abrazo a todos los venezolanos, exclamó que ama todos los venezolanos y “ama a su país”. “¡Que viva Venezuela!” culminó
www.diariorepublica.com
Via UR/Diario Republica