En la avenida 5 con calle 98 de Maracaibo, en pleno corazón de la ciudad, un foco de contaminación es signo del descuido en que se encuentra la metrópolis de Udón, la misma que aún es amada por el Sol, pero jamás por sus gobiernos ni habitantes.
Toneladas de escombros y desechos sólidos diversos yacen entre las ruinas de una edificación cuyo aspecto está muy distante de parecer patrimonio cultural.
A dos cuadras de la Plaza Bolívar, a una del Banco Central de Venezuela y a tres del edificio de Extranjería, la triste escena deja una desagradable lectura a propios y foráneos. El hosco paisaje y la fetidez que lo acompaña hace fruncir el ceño a cualquiera.
Sin embargo, los marabinos siguen esperando que al Gobierno municipal o regional se le frunza el corazón y eche mano a este desastre. De las zonas aledañas acuden a botar basura.
Y como si no bastase, un deprimente blasón adorna la historia: Día y noche acuden al punto indigentes a consumir sustancias estupefacientes en la tenebrosa esquina de la avenida 5 con calle 98. Estas son las imágenes.
Redacción DiarioRepublica.com/Fotos: Eduardo Galbán