El canciller de la República, Elías Jaua, rechazó este jueves las pretensiones injerencistas que los gobiernos de países como Estados Unidos quieren ejercer sobre Venezuela y reiteró que en el país existe plena estabilidad política y social.
«Las pretensiones que Insulza (José Miguel, secretario general de la Organización de Estados Americanos), voceros del gobierno de España y de Estados Unidos quieren presentar ante el mundo y hacer creer que Venezuela amerita una intervención es una falacia que debemos salir a responder», emplazó Jaua.
En declaraciones a Unión Radio aseguró que se trata de una estrategia política que desde la derecha venezolana busca desvirtuar la estabilidad constitucional de las instituciones del Estado y de la democracia, como consecuencia desesperada de la derrota en las elecciones presidenciales del pasado 14 de abril.
Recalcó que gracias a la madurez política de la mayoría de los venezolanos, incluso de venezolanos que comparten la ideología opositora, además de la fortaleza de los poderes públicos en el país se logró evitar la crisis política que la derecha criolla intentó generar con los hechos de violencia ocurridos el 15 de abril, luego que el ex candidato perdedor Henrique Capriles desconociera públicamente la victoria del Presidente Nicolás Maduro.
«Esos voceros poco dijeron de los fallecidos por la violencia, de la quema de las sedes del Partido Socialista de Venezuela (Psuv) y algunos Centros de Diagnóstico Integral (CDI), de las agresiones a compatriotas revolucionarios. En ese momento para ellos no había crisis, pero es lamentable trifulca en la Asamblea Nacional se usa como pretexto para intentar desarrollar una política de injerencia en los asuntos internos de Venezuela», rechazó el canciller Jaua.
Al respecto, lamentó lo ocurrido las agresiones y escenarios de violencia que se produjo en el Parlamento Nacional el pasado martes y exhortó a los diputados del Psuv a no caer en provocaciones y evitar ese tipo de situaciones.
El ministro para las Relaciones Exteriores criticó la posición asumida por el canciller español, José Manuel García Margallo, quien en una visita a Estados Unidos dio unas declaraciones que evidenciaban el claro interés de inmiscuirse en los asuntos internos de Venezuela.
«El canciller español debe ubicarse. En Venezuela ni se necesita ni tampoco se ha solicitado ni a España ni a ningún otro país del mundo ninguna mediación en los asuntos internos del país. En Venezuela debe privar el juego por garatizar la paz de los actores políicos venezolanos», puntualizó Jaua.
A su vez, el Gobierno publicó un comunicado rechazando las declaraciones de José Miguel Insulza. Este es el texto completo:
República Bolivariana de Venezuela
Ministerio del Poder Popular Relaciones Exteriores
Comunicado
El Gobierno de la República Bolivariana de Venezuela rechaza contundentemente las desmesuradas e injerencistas declaraciones del Secretario General de la Organización de Estados Americanos, José Miguel Insulza, dadas en evidente y estrecha coordinación con voceros del Departamento de Estado y de la Casa Blanca; y en las que partiendo del sobredimensionamiento de la lamentable trifulca ocurrida en días pasados en el Parlamento venezolano, como consecuencia de provocaciones de la bancada opositora, se pretende generar la percepción de una crisis política en Venezuela que amerite su mediación.
El Gobierno Bolivariano considera como absolutamente cínicas e inmorales esas pretensiones, especialmente cuando provienen de quienes han minimizado e invisibilizado los graves hechos de violencia fascista, ocurridos el 15 de abril del presente año y en días subsiguientes, como consecuencia del desconocimiento de los resultados electorales por parte del candidato perdedor y de su llamado a la ira y la violencia después de las elecciones del 14 de abril.
Nada o poco han dicho estos voceros sobre los asesinatos políticos de los ciudadanos y ciudadanas venezolanos, militantes todos de la Revolución Bolivariana: José Luís Ponce, Rosiris Reyes, Hender Bastardo, Luis Eduardo García, Rey David Sánchez, Johan Antonio Hernández, Henry Rangel, Keller Guevara y Johnny Alberto Pacheco; y más de 70 heridos, hombres y mujeres del pueblo venezolano, que fueron víctimas de la intolerancia política y social de la dirigencia opositora. Cabe recordar incluso que el diputado Julio Borges, Secretario General del opositor partido Primero Justicia, el día 15 de abril, llamó a “dar muerte a la revolución”, siendo la secuela de esa afirmación la quema de 7 casas del principal partido político democrático de Venezuela, como lo es el Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV).
Nada o poco han dicho estos voceros sobre la promoción por parte de líderes de la oposición venezolana, de una política xenofóbica contra los médicos y profesionales de la salud de nacionalidad cubana, los cuales prestan servicio al pueblo más humilde de Venezuela.
A pesar de este silencio cómplice e inmoral de algunos gobiernos y organizaciones internacionales, las instituciones democráticas venezolanas, junto a la conciencia y madurez política del pueblo formado por el Comandante Eterno Hugo Chávez, lograron conjurar el comportamiento antidemocrático y violento de sectores de la oposición, gozando hoy nuestro país de plena estabilidad política e institucional, con un gobierno legítimo y legal, dirigido por el Presidente de la República Bolivariana de Venezuela Nicolás Maduro Moros, el cual se encuentra desplegado en la calle, atendiendo la demanda social de nuestro pueblo.
Finalmente, el Gobierno de la República Bolivariana de Venezuela rechaza firmemente cualquier intento de promover mediaciones no requeridas, y se muestra dispuesto a confrontar, con toda la fuerza que le permite ser un país independiente, cualquier injerencia, de quienes no tienen moral para hablar de diálogo, democracia y paz, pues han plagado al mundo de guerra, violencia y muerte durante los siglos XX y XXI.
La inmensa mayoría democrática del pueblo de Venezuela y las instituciones del Estado tienen la fuerza legal y moral para garantizar la estabilidad política, la paz y la independencia de la Patria de Simón Bolívar.
Vía AVN