El diálogo para la paz continúa con el sector racional de la oposición, donde integrantes de otras tendencias, conscientes de la política nacional van sumándose. Los acuerdos, son garantía visible de que el Presidente Maduro es demócrata convencido y practica el contenido de la Constitución que nos dimos en 1999.
Chávez se dedicó personalmente como un constitucionalista más, por la vía de nuestros delegados, a darle plenitud a los sueños y discusiones de muchos años al documento de acuerdos básicos de la patria Bolivariana.
De algún lugar de su esencia, que ni debe ser la mente ni el corazón, los sectores extremistas de la oposición han sacado la idea de que solo entregamos el poder político por la fuerza. Recién salidos de las cárceles, anunciábamos un camino distinto al de la rebelión cívica militar: elección popular, que fue posible en el Zulia al ganar como gobernador en el 96 y con Chávez en 1998.
Nuestra presencia en el mando del gobierno la garantiza la voluntad mayoritaria de nuestra gente. Es por ello que la Fuerza Armada se mantiene fiel al Presidente elegido constitucionalmente. Aún en el supuesto negado, que regresaran al gobierno, solo por la vía electoral, sería imposible que revirtieran el camino que emprendimos de construir una república libre e independiente.
Es bueno que los reductos de la oposición lo entendieran, dejaran de recorrer el mundo con dinero producto de la venta a futuro de nuestra nación. Que asumieran la vía del diálogo, la constitución por la paz y la convivencia. Que los sectores extremistas sacarán solamente las armas que están en la letra de la carta magna y allí pudiéramos saldar diferencias, respetando la decisión de las mayorías y no anhelando que tropas y presiones extranjeras les hagan el trabajo que deben hacer ellos en las calles de nuestro pueblo.
El camino de la Constitución está abierto, todo es posible, Bienvenidos los opositores racionales que defienden sus ideas y posturas con las armas acordadas en la ley.
FRANCISCO J. ARIAS CÁRDENAS