Integrantes de la Red Nacional de Derechos Humanos denunciaron ayer ante el Ministerio Público la existencia de un “mercado negro” donde se venden las medicinas requeridas por pacientes con VIH, que el Ministerio de Salud entrega gratuitamente.
Representantes de esta red consignaron ante la Fiscalía un fajo de documentos que soportan la denuncia, explicó Asdrúbal González, representante de esa organización.
Entre los soportes llevados a la Fiscalía, hay dos actas de inspección redactadas por la Defensoría del Pueblo, una de ellas sobre el Servicio Autónomo de Elaboraciones Farmacéuticas (Sefar).
“La Defensoría descubrió que existen inconsistencias en el registro de las firmas y la entrega de medicinas en algunas farmacias”, aseveró.
González detalló que en el país existen 43 mil personas infectadas con el virus, cuyo tratamiento les es expedido a través de 55 farmacias. “En algunas de esas, al paciente le hacen firmar la entrega de la medicina, pero no se materializa”, aseguró González, quien añadió que en Carabobo hay una farmacia con 300 cédulas de identidad repetidas.
En otro centro de entrega de antirretrovirales se constató la existencia de 560 cajitas de Viraday (pastillas) y solo 130 récipes. “Allí hay un faltante que la farmacia se está reservando”, dijo González.
Los denunciantes presumen que hay “personas inescrupulosas” inscritas en el registro oficial de pacientes con VIH-sida que no padecen de la enfermedad. “Esas personas retiran la medicina con récipes llenos de tachaduras y luego las venden en el mercado negro a través de las redes sociales o personalmente alrededor de los hospitales”, manifestó.
Contrabando. “El Estado está comprando los medicamentos, pero no están llegando a los pacientes porque se desvían al mercado negro”, agregó González, quien además alertó de un contrabando de esas medicinas hacia países vecinos.
Según González, el Estado invirtió el año pasado 43 millones de dólares en medicinas para pacientes con VIH-sida, mientras que en 2014 hay un presupuesto que ronda los $80 millones.
Vía UN/www.diariorepublica.com