El oeste de Estados Unidos está bajo una dura ola de calor que hace elevarse las temperatura en torno a los 125 grados Fareheit, unos 50 grados centígrados.
California, Nevada y Arizona han alertado a sus poblaciones de que extremen la precaución y eviten pasar mucho tiempo en el exterior.
Los que no pueden refugiarse por trabajo, como este controlador del tráfico, tienen que tomar sus medidas.
“Trato de seguir al sol y ajustar mi exposición para escapar del calor. No quiero que me de un golpe de calor o algo así”.
Hasta 200 personas en el condado de Clarks han sufrido golpes de calor y 30 han tenido que ser tratadas en el hospital.
Ante este panorama son muchos los que se refugian en las piscinas.“Los socorristas también saltan a la piscina para refrescarse. Hace mucho calor”.El récord de temperatura se ha alcanzado en los desiertos californianos. El valor registrado: 57 grados, es el más alto en 100 años.
Agencias